Las ficciones europeas han captado la necesidad de desarrollar historias relacionadas con el cambio climático y sus derivadas como el retroceso de los glaciares noruegos. Esas propuestas noruegas para enfrentarse al calentamiento global han sido desarrolladas en diferentes artículos en El Ágora e incluso en Ágoraseries con la magnífica serie que fue Ocupados o nuestra propuesta de hoy, Ragnarok.
Ragnarok se inscribe en ese contexto de denuncia y concienciación medioambiental y está dirigida principalmente a las jóvenes generaciones combinando de una forma bastante efectiva la mitología de los dioses vikingos con los problemas derivados del cambio climático y la polución industrial.
Todo ello se debe a la buena mano de su creador el danés Adam Price, que tras escribir Borgen, una de las mejores series políticas de la historia, ha decidido pasarse al terreno medioambiental, pero añadiendo ese toque de superhéroes y dioses vikingos para que sea mucho más atractiva para todos los públicos.


La trama
La ciudad de Edda depende absolutamente de la industria Jotul, la más importante de la región. A pesar de mantener una fachada aparentemente impoluta, Jotul no duda en esconder sus prácticas ilegales de vertidos de residuos que están contaminando los glaciares y fiordos cercanos, muy amenazados por el cambio climático.
Esa industria es propiedad de la familia Jotul, una reencarnación humana de dioses malignos vikingos que llevan siglos controlando esa región con todo tipo de prácticas sobrenaturales.
Su control absoluto se va a ver amenazado por la llegada de Magnes, un joven adolescente retraído y tímido, que se traslada a Edda con su madre y su hermano para volver a la casa familiar y al pueblo en el que murió su padre en extrañas circunstancias. Magnes se hace amigo de una chica ecologista, Isolde, empeñada en denunciar los crímenes medioambientales de las industrias Jotul y conduce a Magnes hasta un glaciar en regresión donde se almacenan todas las miserias y residuos tóxicos de la industria local
Tras una serie de circunstancias Magnes descubre que es el sucesor natural del gran dios vikingo Thor y controlador de su martillo sagrado Ragnarok, empezando un lucha desigual contra la poderosa familia Jotul.


La enésima lucha entre el bien y el mal es la trama principal de Ragnarok, con el factor diferencial de que las fuerzas del bien no tienen muy claro su papel en esa lucha, en especial el pobre Magnes que debe adaptarse a sus nuevos superpoderes con un aprendizaje lleno de dificultades y que no puede compartir con casi nadie.
Los villanos son presentados como unos verdaderos delincuentes medioambientales, como una adaptación de la maldad secular de esa familia a las características actuales y no dudan en enfrentarse a su nuevo enemigo, antes de que pueda convertirse en el poderoso Thor.
La buena traza de Adam Price hace que la mezcla de drama adolescente, denuncia medioambiental y trama de superhéroes y dioses vikingos se sostenga bastante bien con una evolución continua de los personajes, incluyendo giros trágicos e inesperados en determinados momentos de las dos temporadas que ha durado hasta el momento.
Otro gran aliciente ha sido su rodaje en la preciosa ciudad de Edda y sus alrededores, destacando la foto que todo turista que vaya en Noruega se tiene que hacer como es en la cima de la impresionante meseta del Preikestolen, como en la imagen superior y como explican en el siguiente video.
Un actor joven pero con experiencia
El protagonista Magnes ha sido interpretado por el joven actor noruego David Stakston , salido de la más que fecunda cantera de actores juveniles que ha sido la fabulosa serie juvenil noruega Skam y lo cierto es que cumple a la perfección como ese atribulado adolescente que se ve convertido de la noche a la mañana en el dios Thor y es incapaz de asimilarlo inicialmente.


Glaciares, fiordos y superhéroes son una mezcla atractiva siempre y cuando no tengas alergia al género fantástico puesto que, en este caso, lógicamente y al tratarse de deidades vikingas vas a ver algunos momentos poco realistas, pero sin abusar de ellos.
Las vistas son refrescantes e ideales para disfrutar en medio de la canícula del mes de agosto como una propuesta diferente dentro de la edición veraniega de El Ágora, para que no abandones tus visionados seríéfilos durante tus vacaciones, por lo que nada mejor que dejarte con el tráiler oficial de Ragnarok que tienes a tu disposición en Netflix.
