Los embalses más grandes de España - EL ÁGORA DIARIO

Los embalses más grandes de España

Las más de 1.200 grandes presas que se reparten por España esculpen en el terreno algunos de los embalses más grandes de todo el continente. Algunos de ellos esconden misterios bajo sus aguas, mientras que otros pueden dar de beber a Comunidades Autónomas durante 30 años


La naturaleza irregular del régimen hidrológico español nos ha exigido redoblar nuestros esfuerzos para proteger y garantizar la disponibilidad del agua, un recurso que, según el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico (Miteco), “es indispensable para la vida y la actividad económica”.

Esos esfuerzos se han canalizado tradicionalmente en España en la construcción de presas en los cauces de los ríos que, en la actualidad, representan un gran motor de desarrollo para la economía española al “regular el agua de los embalses, abastecer la población y generar grandes beneficios económicos”.

Los embalses sirven como enormes reservas de agua y nos protegen frente a inundaciones, pero también tienen desventajas, como la fragmentación de los ecosistemas 

La historia de estas infraestructuras se remonta a la época romana y las primeras grandes presas, definidas como aquellas que superan los 15 metros de altura o que con más de cinco metros tienen un volumen de embalse de más de tres millones de metros cúbicos, se construyeron ya en el siglo II Después de Cristo.

En el presente, el número de grandes presas en España ascienden por encima de las 1.200 y gracias a ellas nuestro país tiene una capacidad de almacenamiento de agua de unos 56.000 hectómetros cúbicos. No obstante, unas 450 son anteriores a 1960 y más de 100 ya existían en el año 1915, lo que indica, según el Miteco, un enorme desafío en términos de conservación y rehabilitación.

En cualquier caso, muchas de ellas representan auténticas obras de la ingeniería hidráulica que han logrado dar a luz a embalses capaces de abastecer regiones enteras durante años, algunos de ellos entre los más grandes de Europa. Por ese motivo, os exponemos a continuación los embalses más grandes de España nacidos por la construcción de las presas.

1. Embalse de Serena (Badajoz)

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Vista aérea del embalse de la Serena

Emplazado sobre el río Júcar, constituye el segundo embalse más grande de la península Ibérica, tras el embalse portugués de Alqueva -que también es el más grande de Europa. De acuerdo con la ficha técnica del Miteco, la superficie del embalse es de 13.949 hectareas y es capaz de almacenar más de 3.200 hectómetros cúbicos de agua.

Toda esa agua podría servir para abastecer a Extremadura durante más de 30 años, sin embargo, lejos del líquido elemento, el embalse cuenta también con una central que ayuda a sostener la segunda mayor fuente de energía renovable de nuestro país: la hidroeléctrica.

2. Embalse de Alcántara (Cáceres)

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Vista del embalse y la presa de Alcántara

También en Extremadura se encuentra el segundo embalse más grande de nuestro país, el embalse de Alcántara, que en el momento de su edificación a finales de la década de los 60 se convirtió en el embalse más grande de toda la Europa occidental.

En la actualidad, el embalse ocupa una superficie de 10.400 hectáreas y tiene una capacidad de 3162 hm3, aunque lo más curioso es que todas esas aguas acabaron por inundar algunos de los vestigios humanos más representativos de la zona, como poblados enteros e, incluso, fortalezas.

La Torre de Floripes es una de las huellas más representativas que se puede ver “nadando entre las aguas”. De origen árabe, la fortaleza en la que se sitúa la torre se construyó para proteger la Vía de la Plata que solo se puede ver cuando el nivel del agua baja.

3. Embalse de la Almendra (Salamanca)

El embalse de la Almendra está contenido por la presa más alta de España

Al noroeste de Salamanca, el río Tormes ve interrumpido su camino hasta el Duero por un muro de hormigón de 200 metros de altura que constituye la mayor presa de nuestro país: la presa de la Almendra.

Tras ella, el agua acumula hasta formar el tercer embalse más grande nuestro país, con 8.650 hectáreas de superficie y una capacidad de 2648 hm³ de agua.

Una de las curiosidades que encierra este embalse, o más bien la central hidroeléctrica que da vida su agua, es que esta última infraestructura está construida a unos kilómetros al oeste del embalse, en vez de permanecer al pie de la presa como en otros casos. Esto se hizo así para conseguir un salto de 400 metros de altura, en vez de 200.

4. Embalse de Buendía (Guadalajara)

Vista aérea del embalse de Buendía

Entre las provincias de Cuenca y Guadalajara, en el cauce del río Guadiela, se erige la presa de Buendía, de 79 metros de altura, que obstruye sus aguas para dar vida al cuarto embalse más grande de nuestro país.

Según los datos técnicos, este embalse se extiende por 8.198 hectáreas y tiene una capacidad de 1.639 hm3. Al igual que otros embalses, su construcción significó la desaparición en vida de muchos monumentos históricos que solo se pueden ver cuando hay épocas de sequías.

En este caso, las aguas del embalse ocultan los cimientos de unas termas romanas situadas cerca de la que fue la antigua ciudad de Ercávica y el llamado “Real sitio de la Isabela”, un pueblo balneario mandado construir en el siglo XIX por el rey Fernando VII.

5. Embalse de Mequinenza (Zaragoza)

Con 7.540 hectáreas y una capacidad de 1.530 hm3, el embalse de Mequinenza se presenta como mar de Aragón por ser la reserva de agua más grande la Comunidad Autónoma. Tanto la presa como el embalse reciben el nombre de la localidad de Mequinenza que las aguas ocultaron casi por completo.

En su inauguración soltaron millares de ejemplares de peces que transformaron al embalse en todo un atractivo para la pesca. Además, en él se realizan otras actividades, como la navegación a vela.



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