Un estudio reciente sitúa el origen del agua, tal y como la conocemos en la Tierra, mucho antes de la formación del planeta, gracias a depósitos de gas que incluían vapor de agua, en los primeros 200.000 años del Sistema Solar



La composición isotópica inicial del agua en el Sistema Solar es de suma importancia para comprender el origen del agua en los cuerpos planetarios, pero sigue siendo desconocida, a pesar de numerosos estudios.
Para comprender cómo surgió la vida, los científicos investigan la química del carbono y el agua. En el caso del agua, rastrean las diversas formas, o isótopos, de sus átomos constituyentes de hidrógeno y oxígeno a lo largo de la historia del universo, como una búsqueda del tesoro gigante.
Ahora un estudio de investigadores del Centro Nacional para la Investigación Científica (CNRS) de Francia, la Universidad Paris-Saclay, la Comisión Francesa de Energías Alternativas y Energía Atómica (CEA), y la Universidad de Pau y el Pays de l’Adour (UPPA),1 con el apoyo del Muséum National d’Histoire Naturelle (MNHN), han seguido el rastro de la composición isotópica del agua hasta el inicio del sistema solar, en las regiones interiores donde se formaron la Tierra y los otros planetas terrestres.
El estudio propone que la composición isotópica del agua interior del Sistema Solar se estableció durante el colapso del núcleo de nubes protosolares debido a una mezcla masiva de agua interestelar
Sus datos muestran que dos depósitos de gas existieron durante los primeros 200.000 años de nuestro sistema solar, incluso antes de la formación de los primeros embriones planetarios. Uno de estos reservorios consistía en el gas solar en el que se originaba toda la materia de nuestro sistema solar. Con el meteorito, los científicos pudieron medir su registro directamente por primera vez.
El segundo depósito de gas estaba enriquecido en vapor de agua y ya tenía la firma isotópica del agua terrestre. Fue creado por una afluencia masiva de agua interestelar en las regiones internas calientes del sistema solar, tras el colapso de la envoltura interestelar y la formación del disco protoplanetario, a partir del cual posteriormente fueron surgiendo los embriones planetarios.
La existencia temprana de este gas con una composición isotópica similar a la Tierra implica que el agua de la Tierra estaba allí antes de la acreción de los primeros bloques constituyentes de nuestro planeta. Estos hallazgos se publican en Nature Astronomy .
«Aquí utilizamos la composición isotópica del hidrógeno en inclusiones ricas en calcio-aluminio (CAI) de meteoritos primitivos, las rocas más antiguas del Sistema Solar, para establecer la composición isotópica de hidrógeno del agua al inicio de la formación del Sistema Solar», recoge el artículo científico.