El presidente de Agbar, Ángel Simón ha abogado por un compromiso transversal para reducir la brecha de la desigualdad con medidas estructurales, medidas de las empresas, medidas individuales para generar oportunidades y alianzas



La internacionalización, el compromiso social, la dinamización empresarial y la innovación dentro del contexto bélico actual y la creciente desigualdad social acelerada tras la pandemia de la COVID-19 han sido el eje del debate desarrollado en el marco del XXI Congreso de la Confederación Española de Directivos y Ejecutivos (CEDE) que se celebra en el Bilbao Exhibition Centre (BEC) este jueves. Los directivos españoles han querido destacar en este congreso el papel de las empresas a la hora de liderar el compromiso con la sociedad para afrontar dos de las crisis más acuciantes: la climática y la de las desigualdades, tal y como ha señalado en su intervención Ángel Simón, presidente de Agbar y y vicepresidente ejecutivo sénior de Veolia para Iberia y América Latina.
Ante el dato de los niveles de pobreza medidos tras la pandemia, que sitúan en el 28% el porcentaje de españoles en riesgo de pobreza, Simón ha defendido que «ante la creciente desigualdad urge actuar con medidas estructurales, medidas de las empresas, medidas de cada uno de nosotros para generar oportunidades y alianzas«.
Para Simón el sector del agua urbana, reconocida como derecho humano, es un indicativo que pone en evidencia la evolución de la desigualdad en la riqueza de la sociedad, «una brecha que se ha ido agrandando desde 2008, cuando solo un 1% de los usuarios tenía dificultades para pagar este servicio esencial, hasta el 10% registrado tras la pandemia».
Afrontar esta desigualdad, «que trasciende lo económico y la encontramos también en la brecha digital, la idiomática, la de la discapacidad o la educativa, forma parte del pacto social que tenemos que promover desde las empresas» a través del compromiso con todos los stakeholders, con la sociedad de cada territorio y el tercer sector.
Simón ha destacado que las empresas, como parte de la sociedad, tienen que contribuir a canalizar talento joven para abrir un futuro a los jóvenes que no ven salida a su esfuerzo, apostando por modelos formativos orientados a la empresa como la Formación Profesional Dual que permita incorporar ese talento que «no podemos permitirnos que se pierda».
En el mismo foro de directivos, el ex Ministro de Economía Jordi Sevilla ha insistido en que «las desigualdades son cosas de todos que no afectan sólo a los más vulnerables o a los más pobres porque generan descontento social que se traduce en votos antisistema, especialmente entre los más jóvenes que se enfrentan a la falta de empleo o con suerte a convertirse en trabajadores pobres que vivirán peor que sus padres». El exministro socialista ha señalado que como causa del descontento social que «les hemos vendido una globalización que iba a hacer más ricos a todo el mundo, y finalmente no ha sido así”.
