Abrir el grifo para lavarnos las manos durante la pandemia ha sido posible en todos los hogares españoles gracias al esfuerzo y compromiso de los operadores del ciclo integral del agua que se presentan como palanca de recuperación y reconstrucción verde en la era post-covid



Pese a que durante los cien días que duró la cuarentena decretada por el Estado de Alarma no hemos dejado de abrir el grifo una y otra vez para higienizarnos las manos con agua y jabón, el consumo de este preciado recurso ha caído en torno a un 15% debido al cerrojazo de la actividad industrial y la caída del turismo.
A esta bajada del consumo, un 20% en la Costa Brava e Ibiza, del 11% en Sevilla o el 9,1% en Madrid, hay que unir que los impagos que, como consecuencia de la crisis económica generada por el COVID-19, se han incrementado un 50% pasando del 3,5 al 5,5%.
Dos elementos que han impactado de lleno en las cuentas de resultados de todos operadores del ciclo del agua, públicos, privados o mixtos.
Esto pone en riesgo el modelo ya que el equilibrio económico es una condición ineludible para la correcta prestación de este servicio esencial, tal y como refleja la Directiva del Marco del Agua de la Unión Europea.
Sin embargo, la industria está convencida de que en la nueva realidad pueden desempeñar un papel esencial como palanca para la recuperación y la reconstrucción verde en el marco del Pacto Verde Europeo.
Así lo plantearán los responsables de las patronales del sector del ciclo integral del agua, AGA y AEAS que el próximo jueves, día 25 expondrán las conclusiones del estudio «El sector del ciclo urbano del agua como vector de recuperación sostenible tras la crisis del COVID-19″ elaborado por la consultora PWC.
Será en el marco del EFE Fórum Medio Ambiente AGUA URBANA y COVID , que se prodrá seguir en directo online, donde el sector del agua urbana presente propuestas concretas para ayudar a la recuperación social y económica de nuestra sociedad: análisis y control de aguas, planes de contingencia COVID en instalaciones de agua potable y de aguas residuales… acciones que están incardinadas con las estrategias del Green Deal europeo y que son útiles para la recuperación tras la reciente crisis provocada por el COVID-19.
Desde hace tiempo, el sector viene defendiendo la necesidad de reforzar el papel del agua urbana en la agenda política y de impulsar las acciones programadas en los Planes Hidrológicos de Cuenca, perfeccionados en el Plan DSEAR, incluyendo el cumplimiento de la Directiva de Depuración (271/91), y en el refuerzo de la constante renovación del parque público de activos e infraestructuras.
Durante la crisis del COVID-19, la prestación de estos servicios se ha adaptado a las condiciones surgidas por el estado de alarma, prestándose con garantías de seguridad y continuidad, tal y como corresponde a unos servicios esenciales.