El Ministerio de Transición ecológica ha puesto en marcha una Red Nacional para el control de las aguas residuales frente al Covid-19 que realizará 3.000 análisis en depuradoras de toda España



Las aguas residuales se han convertido en un indicador que permitirá anticipar la detección de los posibles rebrotes de COVID-19 en el futuro.
Para ello el Ministerio de Transición Ecológica, MITECO, y el Ministerio de Sanidad impulsan una red de control de las aguas residuales como indicador epidemiológico de alerta temprana de propagación del COVID-19 a través de un grupo técnico entre el Gobierno y las Comunidades Autónomas para coordinar las actuaciones y seleccionar las zonas de muestreo y las frecuencias en función de la evolución de la pandemia.
La red de control prevé la realización de más de 3.000 análisis de muestras de control del material genético del SARS-CoV-2 en las aguas residuales de depuradoras urbanas de todo el territorio nacional y cuenta con 2 millones de euros, que se revisarán en función de la evolución de la pandemia.
Esta red de alerta de rebrote de COVID-19 a través de la medida y el análisis de las aguas residuales ha contado con el apoyo del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).
En estos momentos se está ultimando la red de puntos de medida en una serie de ciudades seleccionadas por las autoridades autonómicas, que supone además el impulso a una red de trabajo entre técnicos de las administraciones y científicos que servirá para detectar con antelación posibles rebrotes de COVID-19.
Ante la situación generada por la pandemia y su impacto en la salud pública han surgido varios trabajos, tanto a nivel nacional como internacional, que relacionan la presencia de material genético del virus Sars-Cov-2 (causante de COVID-19) en las aguas residuales con los casos contrastados de infección por el coronavirus.
Estudios en esta materia concluyen que la detección de dicho material genético puede ser una herramienta de detección temprana de la propagación de la enfermedad, de modo que se podría utilizar como indicador epidemiológico de alerta temprana de gran utilidad para futuras incidencias de la enfermedad.
Existen ya diversas iniciativas España, fundamentalmente en la Región de Murcia y Comunidad Valenciana que muestran esta relación e, incluso, la Comisión Europea está trabajando para impulsar una red europea donde compartir información y muestreos.
El Ministerio de Sanidad trabaja también en l creción de una plataforma para compartir información entre todos los agentes implicados en la gestión de las aguas residuales y rebrotes de COVID-19.
Tiene revisto establecer una red de contactos entre los laboratorios y administradores del agua y sanitarias para canalizar y compartir la información y conocimiento generado e incorporará la realización de muestreos en una selección de zonas continentales en aguas de baño.
En la realización de estos trabajos participan técnicos de ambos Ministerios, del CSIC, el Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas (CEDEX) y varias universidades, que en los próximos meses darán soporte a las autoridades sanitarias, a los gestores del agua de las Comunidades Autónomas y a las empresas de abastecimiento y saneamiento.
