Determinar el coste del cambio climático antropogénico en términos macroeconómicos exige profundizar en el impacto del aumento de los fenómenos de lluvias intensas sobre el conjunto de la economía, según un estudio reciente



El cambio de los patrones meteorológicos derivados del cambio climático augura un incremento de los fenómenos de lluvias torrenciales y según un nuevo estudio del Instituto Potsdam para la Investigación del Impacto Climático en Alemania más días de lluvias extremas podrían significar un golpe para la economía global.
La investigación concluye que el incremento de episodios de lluvia extrema podría reducir medio punto porcentual del crecimiento anual de un país
La investigación climática anterior se ha centrado principalmente en la temperatura o la precipitación anual, por lo que las evaluaciones macroeconómicas de los impactos climáticos realizados hasta ahora carecen de un análisis de la distribución de las precipitaciones diarias y esta investigación suple esa carencia mediante el análisis de 40 años ( entre 1979 a 2019) de datos del impacto económico de las lluvias extremas intensas y diarias en más de 1.500 regiones y en 77 países.
El agua es un recurso económico escaso, señala el estudio. Tener más de este bien económico es generalmente una ventaja, pero no es un beneficio en el caso de períodos cortos e intensos de lluvia, que pueden provocar inundaciones. Las inundaciones no solo pueden destruir la infraestructura, sino que también pueden interrumpir la producción y la cadena de suministro, explica.
La prosperidad y el empleo son vulnerables a posibles cambios futuros en el clima
Los investigadores el incremento ligero de la cantidad de lluvia torrencial caída durante todo el año podría reducir medio punto porcentual del crecimiento anual de un país. Eso podría ser significativo, considerando que la mayoría de las naciones desarrolladas crecen solo 2 o 3 puntos porcentuales cada año.
Los investigadores tuvieron en cuenta una serie de otros factores que podrían haber afectado el crecimiento económico durante el período de tiempo del estudio, como los eventos políticos locales y las tendencias económicas globales. Concluyeron con «muy alta confianza» que había un vínculo causal entre los cambios en las precipitaciones y los cambios en el crecimiento económico.
Los resultados demuestran que centrarse en los efectos beneficiosos de una mayor precipitación anual solo para los países de bajos ingresos dependientes de la agricultura proporciona una imagen incompleta de los efectos económicos de los cambios en las precipitaciones.
Los aumentos en las precipitaciones diarias extremas y el número de días húmedos son adversos para el crecimiento económico, particularmente en los países de ingresos altos y a través de los sectores manufacturero y de servicios.
La predicción más sólida del cambio futuro de las precipitaciones bajo el cambio climático antropogénico es la intensificación de lluvias extremas diarias en todo el mundo. La identificación de un efecto adverso sobre las tasas de crecimiento económico a partir de este aspecto de la distribución de las lluvias es, por lo tanto, un paso crucial para evaluar los costos del cambio climático antropogénico y tener en cuenta este aspecto aumentará las estimaciones de estos costes en comparación con trabajos anteriores.
El estudio también resalta que se proyectan cambios considerables a partir de los modelos climáticos globales para los otros aspectos de la precipitación, pero es probable que sean heterogéneos regionalmente y estén sujetos a una mayor incertidumbre y estos cambios causarían más pérdidas y ganancias económicas regionales que actualmente son difíciles de cuantificar.
En definitiva, sugieren que se requiere más trabajo para cuantificar las consecuencias económicas de los cambios futuros en las precipitaciones, teniendo en cuenta de manera integral tanto la magnitud como la incertidumbre de los impactos de todos los canales identificados.