La falta de lluvias y las elevadas temperaturas en el centro de Europa dejan los lagos alpinos en niveles mínimos. En Suiza, el lago Constanza está en su récord histórico y, en Italia, el lago de Garda está inusualmente bajo



La sequía que afecta a Europa central se está dejando notar en campos, ríos y en las cumbres más altas. Cuatro grandes lagos de los Alpes suizos se encuentran en un nivel históricamente bajo debido al calor y la falta de lluvias que se abate sobre el país alpino, donde también los ríos y las capas freáticas se encuentran en mínimos, confirmó la Oficina Federal para el Medio Ambiente.
Los lagos de Constanza, Cuatro Cantones, Walen y Lugano nunca habían experimentado un nivel de agua tan bajo desde que hay registros, informa Efe
Mientras tanto, los ríos Rin y Reuss, que nacen en los Alpes, tienen tan poca agua que sus valores están entre los bajos documentados para meses de verano, según la agencia de noticias suiza Ats.
Las sucesivas olas de calor que se registran desde junio en Suiza y gran parte de Europa han acelerado el derretimiento de las capas de hielo en los Alpes, y las lluvias que se prevén serán insuficientes para revertir rápidamente esta situación.


Las temperaturas tan elevadas también tiene un impacto en la fauna fluvial y lacustre debido a que muchas especies no soportan un agua tan cálida: se ha llegado a 27,4 grados, muy cerca del récord de 28,2 grados en 2019.
«La situación es muy particular porque es una combinación de calor y de sequía. Los ríos tienen poca agua, así que se calientan más rápido, una situación que también se refleja en la temperatura de los lagos», indicó un experto del organismo medioambiental.
En algunas regiones de Suiza se han emprendido operaciones de salvamento y se está trasladando a ciertas especies sensibles al calor a otros cursos de aguas más frescos.


El italiano lago de Garda también se seca
En Italia también están viendo cómo desciende de nivel uno de sus destinos más emblemáticos, el conocido lago de Garda, el más grande del país con 368 kilómetros cuadrados.
Hacía 15 años, desde el 2007, que el lago no se encontraba en un nivel tan bajo. Muchas de las instalaciones turísticas de la zona han visto como playas y embarcaderos destinados a actividades acuáticas se quedaban secos dejando al descubierto las piedras y la arena, con los barcos varados sobre ellas.
Te puede interesar
Italia ve secarse el río Po
La falta de agua en la cabecera se deja sentir lógicamente cauce abajo. El Rin, el gran río navegable de Europa, experimenta este verano un descenso notable que está afectando al uso para el transporte de esta gran vía fluvial y comercial.
El nivel de las aguas del Rin marcaba estos días 37 centímetros. Esto no significa que sea ésa la profundidad del río, sino que es la diferencia estimada entre la superficie de las aguas y el llamado «punto cero», a partir del cual podría interrumpirse la navegación.
El Rin es clave para el transporte de materias primas, y con su nivel actual solo es navegable para barcos con carga reducida, lo que resulta ruinoso para el sector.
