La Agencia Vasca del Agua (URA) está construyendo una balsa para recoger los vertidos de lixiviado que se han producido a causa del derrumbe del vertedero de Zaldibar. La entidad sigue detectando amonio en la regata del río Aixola, a los pies de la zona siniestrada



El tiempo sigue corriendo desde que el 6 de febrero se viniera abajo el vertedero de Zaldivar (Vizcaya) sepultando a dos personas y generando una crisis medioambiental que ha destapado la mala gestión de los vertederos en España. Las tareas de búsqueda de los dos cuerpos continúan y los trabajos para contener la contaminación provocada por el derrumbe prosiguen.
La Agencia Vasca del Agua (URA) ha iniciado esta semana la construcción de una balsa para recoger los vertidos de lixiviado que se han producido a raíz del hundimiento y evitar su filtración a las aguas del río Aixola, que discurre a los pies del vertedero. El objetivo es contener la flitración de los líquidos que atraviesan los residuos industriales arrastrando gran cantidad de los compuestos tóxicos hacia el agua del río.
URA lleva informando desde hace alrededor de dos semanas de la presencia de amonio y DQO (parámetro que mide la cantidad de sustancias que hay disueltas o en suspensión en un líquido, susceptibles de ser oxidadas por medios químicos ) en un tramo del rio Aixola de unos 330 metros situado a los pies del desprendimiento y denominado regata del Aixola.
Succión de contaminantes
Para eliminar o minimizar este vertido, que en algunos momentos llegó a ser de 3 litros por segundo o 10.800 litros a la hora, URA también llevó a cabo, entre la noche del pasado 20 de febrero y la madrugada del 25, una actuación para retener los lixiviados que llegaban al Aixola procedentes del vertedero. Posteriormente se procedió a su evacuación, mediante succionado, y se trasladaron en camiones a la depuradora comarcal de Elgoibar (Gipuzkoa), donde están siendo tratados.
Esta actuación ha permitido recoger alrededor de 365 metros cúbicos de lixiviado (365.000 litros), lo cual supone una media de 0,82 litros por segundo, y evitado su vertido a la regata del Aixola.
URA precisa en su último informe que sigue detectándose la presencia de amonio y DQO, así como del parámetro Demanda Biológica de Oxígeno (DBO). Asegura que las «actuaciones y las labores de evacuación del lixiviado se mantendrán el tiempo que sea necesario, con las modificaciones y mejoras que se puedan ir implementando, hasta la solución definitiva de derivación de todos los lixiviados al saneamiento comarcal, tal y como se estaba realizando con anterioridad al deslizamiento del vertedero del 6 de febrero».
