Un proyecto científico, enmarcado en la inciativa FlowPhotoChem, pretende obtener productos químicos como el etileno, utilizado en la industria de los plásticos, usando como materia base el agua, el dióxido de carbono y la energía solar



El etileno se presenta como uno de los compuestos químicos más importantes de la industria química al ser la base de productos como el polietileno, entre otros polímeros. El problema es que, para poder fabricarlo, se necesitan elementos derivados del petróleo y procesos que requieren una enorme cantidad de temperatura y presión. Esto provoca que el material se salde con una importante huella ambiental.
El Pacto Verde Europeo o Green Deal propone hacer que el clima de Europa sea neutral para 2050, y la estrategia Planeta Limpio para Todos establece objetivos ambiciosos para reducir las emisiones de dióxido de carbono (CO2) en la UE en un 40% para 2030 y en un 80-95% para 2050.
Uno de los mayores contaminadores de Europa es la industria química, que emite más de 145 millones de toneladas de CO2 equivalentes cada año. Por este motivo, un grupo de investigadores del CSIC se ha lanzado en la búsqueda de fuentes más sostenibles para obtener este producto, dando como resultado un novedoso proyecto, integrado en la iniciativa FlowPhotoChem, que tiene como objetivo transformar agua, dióxido de carbono y energía solar en etileno,
“En lugar de generar dióxido de carbono, el sistema que hemos desarrollado lo utilizará como base para producir productos químicos sin el uso de combustibles fósiles. De esta manera, reduciremos las emisiones de gases de efecto invernadero en Europa y contribuiremos a un planeta más limpio”, explica Hermenegildo García, investigador en el ITQ (CSIC-UPV) que lidera el proyecto.
“La contribución de este proyecto a un sistema de energía limpia y sostenible es desarrollar una tecnología que utilice CO2 y agua en vez de derivados del petróleo, y, por otro lado, usar luz solar concentrada como fuente de energía primaria para su obtención”, explica por su parte Josep Albero, del ITQ (CSIC-UPV).
“La sostenibilidad ambiental y la escalabilidad serán partes clave del proceso de diseño para asegurar el sistema en el futuro. Para garantizar que el sistema modular de FlowPhotoChem llegue exitosamente al mercado para reducir las emisiones de CO2, el equipo trabajará con empresas químicas que podrían usar la tecnología que se desarrolle en el proyecto”, concluye García.
