Mientras en otros países aún se buscan respuestas para evitar una crisis económica tras el impacto del coronavirus, Dinamarca ha encontrado una posible solución: un acuerdo entre sindicatos y empleadores para proteger los salarios y prevenir los despidos



El impacto del coronavirus está planteando un reto muy complicado a la sanidad española, cuyos trabajadores están dando lo máximo posible a pesar de no contar siquiera con el suficiente material de protección. Pero, una vez se haya superado este terrible trance, aún asoma otro monstruo por el horizonte: el de la recesión económica, un peaje por el que parece que van a tener que pasar todos los países tras la parálisis que vive ahora mismo la producción y el consumo. Sin embargo, desde Dinamarca llega una estrategia pionera que podría reducir muchísimo el impacto de la crisis en sus hogares.
Hace una semana, el Gobierno danés llegó a un acuerdo histórico con los sindicatos y la patronal para evitar los despidos masivos mientras se extienda la cuarentena. Durante los próximos tres meses, el estado cubrirá el 75% de los salarios de los trabajadores amenazados por la pérdida del empleo, hasta un máximo de 23.000 coronas danesas (3.074 euros) brutas mensuales.
Las empresas cubrirán el 25% restante, mientras que los trabajadores renunciarán a cinco días de vacaciones pagadas. Es decir, a cambio de evitar despidos todos las personas de Dinamarca trabajarán cinco días gratis.
El acuerdo cubre tanto a compañías que tendrían que despedir al menos un 30% del personal, como aquellas que tengan que echar a 50 empleados o más. A cambio, las empresas se comprometen a no despedir a ninguna persona por razones económicas mientras reciben una compensación estatal.
Es cierto que cubrir el 75% de los salarios puede parecer una gran inversión para el estado, pero a medio plazo puede ser una estrategia que compense a nivel económico, ya que los despidos se traducen en una pérdida de ingresos a través de impuestos y un aumento de los gastos estatales destinados a pagar el desempleo. Se trata además de una inversión que puede servir para mantener la confianza económica y evitar por tanto una crisis económica más costosa.
«No hay techo»
La partida inicial aprobada serviría para cubrir el 2,5% de todos los empleados no públicos, pero el gobierno socialdemócrata de Dinamarca está dispuesto a poner todo el poder financiero del estado detrás del acuerdo. «No hay techo», dijo el ministro de Finanzas, Nicolai Wammen.
«Tenemos que hacer todo para evitar que Dinamarca entre en crisis económica por el coronavirus», explicó la primera ministra, Mette Frederiksen. El país nórdico, que ha cerrado todas sus fronteras al igual que otros países de la comunidad europea en lo que supone una suspensión virtual de Schengen, lleva ya más de 1.000 contagios y 24 fallecidos.Por supuesto, la estrategia danesa, como cualquier plan contra un virus para el que ninguna economía estaba preparada, no está exenta de grietas. Muchos autónomos y trabajadores independientes, además de las personas con contratos casuales y de cero horas no están cubiertos, aunque se sitúen entre la población más vulnerable y por tanto más afectada por la posible crisis. Además, la cuarentena puede poner en riesgo la estabilidad del fondo estatal para desempleados.
En cualquier caso, lo que sucederá cuando se agote el plazo de tres meses que cubre el pacto sigue siendo una incógnita. Muchos empleadores, especialmente en la industria turística, esperan una recesión mucho más larga, por lo que es posible que haya empresas que prefiera despedir a los trabajadores que pagar el 25% por el personal que no necesitan y no necesitarán. Sin embargo, el compromiso decidido del gobierno y la popularidad de estas medidas entre la población (más de dos tercios de la población apoyan la estrategia gubernamental, según el diario danés Berlingske) pueden abrir la puerta a políticas similares en el futuro.
«El eco de lo que estamos haciendo se escuchará en el futuro. Ahora estamos preparando el camino para que las empresas y los empleados se recuperen de la crisis «, ha resumido Frederiksen.
