Arranca una nueva sección en El Ágora. Mientras dure la crisis del coronavirus, resumiremos en este ‘Diario Internacional’ las principales noticias relacionadas con la pandemia que vienen de fuera de España



El coronavirus es ya un problema global. La epidemia se está extendiendo a gran velocidad por un extenso número de países, que están reaccionando por el momento de manera individual y descoordinada a una crisis internacional. Incluso en el seno de la Unión Europea está habiendo diferentes formas de enfocar estas crisis de salud pública, y eso que el continente se ha convertido ya, según la OMS, en el epicentro del virus. Los cierres de fronteras y las restricciones a la movilidad son ya una realidad del panorama internacional.
En esta primera semana de cuarentena en España, en otros países se empiezan a asumir medidas similares, aunque la extensión del contagio no ha impedido que se celebren elecciones municipales en Francia, con una participación bajísima. Mientras, en el Reino Unido, el Gobierno de Boris Johnson ha optado por un enfoque distinto de la epidemia, menos perjudicial para la economía pero con potenciales consencuencias desastrosas para el sistema sanitario.
A continuación, repasamos la actualidad internacional.
Francia
En el país galo, se celebraba este domingo la primera vuelta de las elecciones municipales, a pesar de que el Gobierno ya había pedido a la población que se quedase en sus casas salvo por motivos de fuerza mayor y había decretado el cierre de bares, restaurantes y otros comercios «no indispensables». Esta contradicción en las instrucciones del Ejecutivo hizo que la participación cayera hasta 20 puntos y alcanzara solo el 44% de la población, el mínimo de la serie histórica.


Toda la oposición, que incluye socialistas, conservadores, ecologistas y la extrema derecha de Marine Le Pen pidieron el aplazamiento de la segunda vuelta de las municipales, ante la imposibilidad de celebrarlas con normalidad por la expansión del virus. Finalmente, Macron anunció que aplaza la segunda vuelta, que estaba prevista para el 22 de marzo. En sus discurso no especificó una nueva fecha para su celebración. “Estamos en una guerra, en una guerra de salud, contra un enemigo invisible».
Esto abre ahora un nuevo debate, ya que puede invalidar incluso los resultados de la primera vuelta, ya que la ley prohíbe realizar estas dos votaciones muy separadas en el tiempo.
En Francia, hay ya un total de 5.400 casos confirmados y 29 muertos, con una curva de contagio similar a la española y la italiana, aunque con un retraso de algunos días. El crecimiento exponencial de la enfermedad en el país vecino y las medidas restrictivas parecen, pues, una cuestión de tiempo.
Alemania


En Alemania, aunque solo fuera en la región de Baviera, también hubo elecciones locales el domingo. Aunque aquí, sin embargo, si hubo una participación relativamente alta, de en torno al 60%, gracias al voto por correo. En el país teutón aún no están teniendo tantos problemas con el virus, que lleva 5.813 casos y 13 muertos, aunque por ahora los contagios son en su mayoría leves o asintomáticos.
Aún así, y a pesar de que durante una semana afirmara que cerrar fronteras «no era la solución», el Gobierno dirigido por Angela Merkel ha decidido limitar el movimiento internacional y clausurar sus fronteras terrestres con Francia, Austria, Suiza, Dinamarca y Luxemburgo. No está sola, en el seno de la UE, en esta táctica: Austria acaba de sellar su paso a Italia, al igual que Eslovenia. Además, países como Hungría, Polonia, República Checa y Eslovaquia también han restringido la libre circulación en la que se basa Schengen.
En los últimos días, los diferentes estados federales han tomado ya medidas drásticas de confinamiento como el cierre de escuelas, y en la mayoría también se han clausurado los cines, teatros, museos y bares.
Reino Unido
A finales de la semana pasada, el Gobierno conservador británico, dirigido por Boris Johnson, adoptó con el coronavirus un enfoque muy distinto al del resto de países desarrollados. En vez de ordenar una cuarentena que pase por el confinamiento en el domicilio, la limitación de movimientos y la prohibición de actos públicos, el Ejecutivo ha optado por aceptar que se va a producir una oleada de contagios masivos. El objetivo es conseguir la llamada inmunidad de grupo (herd immunity), que serviría como freno natural a la expansión de la pandemia e impediría que los hospitales se vieran desbordados.
Para conseguir esa inmunidad que evitaría nuevos contagios, el Gobierno asume que tendrán que pasar el virus al menos un 60% de los británicos. Johnson incluso afirmó que la gente debía aceptar que muchos de sus seres queridos iban a morir. La estrategia, aunque avalada por epidemiólogos al servicio del Gobierno, ha recibido fuertes críticas de la oposición e incluso la prensa afín.
Los colegios siguen abiertos y los bares, llenos. Por supuesto, la economía, sobre todo el sector servicios, va a sufrir mucho menos que con un cierre total, pero está por ver si este laissez faire sanitario funciona y, sobre todo, si se puede mantener en el tiempo. Porque, ante el fuerte rechazo a sus planes, Johnson ya ha empezado a recular.
El Gobierno admite ya que a partir de esta semana se tendrán que prohibir los eventos masivos -la Premier ya se ha adelantado suspendiendo todo el fútbol- y una encuesta en el Sunday Times indica que el 52% de los británicos apoya una declaración de estado de emergencia que imponga medidas restrictivas. Puede que el «experimento británico» tenga los días contandos. La propia ministra de Sanidad, Nadine Dorries, está contagiada y ya está en aislamiento.
América y África
El país que más preocupa en el continente americano es Estados Unidos, que acumula 3.774 casos y 69 muertes y ya ha declarado la emergencia nacional, además de suspender los vuelos procedentes de Europa durante un mes. Las grandes competiciones deportivas están ya suspendidas y ciudades como Los Ángeles y Nueva York ha comenzado a decretar ya el cierre de bares, restaurantes y otros comercios que no sean de primera necesidad.
El Covid-19 también ha comenzado a propagarse por América Latina, aunque por ahora de manera muy lenta y con pocos contagios. Chile cuenta con 75 casos aunque ninguna muerte; Argentina, tiene 46 casos y dos muertes; Panamá tiene 43 casos y 1 muerte. Brasil tiene 200 casos, y Ecuador registra 37 y dos muertes; México tiene 43 pacientes; Colombia, 45, y Perú, 71 casos. Muchos de estos países han limitado ya la aviación internacional y el acceso de personas de países con muchos contagios.En África, Egipto, que fue el primer país en el que se reportó un caso y lleva ya 26 contagios y dos muertes, y Sudáfrica (61) son los países con más contagios. Por su parte, Argelia ha informado de 48 casos y cuatro muertes, Túnez tiene 20 casos y Senegal, donde se han empezado a aplazar actos públicos, 24. En Marruecos es dónde más lejos han llegado en las medidas de control: se han cerrado cafés, restaurantes y cines tras registrar 28 infecciones y su primer muerto.
Sin embargo, algunos expertos y observadores del panorama internacional afirman que el número relativamente bajo de casos de coronavirus en África puede ser el resultado de informes deficientes y bajas tasas de pruebas.
Por ahora, se han confirmado varios casos en Burkina Faso (7), Ghana (6), Camerún (4), Namibia (2), Nigeria (2), Islas Seychelles (2). En Togo, Gabón, República del Congo, la República Democrática del Congo, República Centroafricana, Costa de Marfil, Kenia, Mauritania, Guinea, Guinea Ecuatorial, Ruanda, Etiopía, Sudán y Suazilandia hay al menos ya un caso confirmado.
