Un documento actualizado el 4 de abril por el Ministerio de Sanidad altera las ideas manejadas hasta ahora sobre transmisión del virus. Admite que hay casos confirmados de infección de perros y gatos por sus dueños y casos de laboratorio de transmisión a hurones y gatos



La epidemia causada por el SARS-CoV-2 ha cogido por sorpresa a la comunidad científica y a las autoridades de salud, que intentan contra reloj averiguar todo sobre el virus, su origen, forma de transmisión y vías de combatirlo.
La última novedad es la constancia de que el coronavirus puede pasar de las personas a los animales domésticos como perros y gatos. Hasta ahora, el consenso era que este tipo de transmisión de ser humano a animal no era posible.
Así lo afirmaba el Ministerio de Sanidad hace apenas dos semanas.
No existe evidencia científica alguna de que los animales domésticos padezcan ni transmitan el #COVID19.
Sigue estas recomendaciones de @AnimalesGob en relación a la higiene con mascotas, su atención sanitaria y pautas para dueños/as positivos en coronavirus.
? pic.twitter.com/1JtIra406Q— Salud Pública (@SaludPublicaEs) March 14, 2020
Sin embargo, a la vista de las nuevas evidencias disponibles, el Ministerio de Sanidad acaba de actualizar el documento técnico que acumula el know how sobre el virus y que se ofrece a los profesionales de salud. El documento, llamado Información científica-técnica. Enfermedad por coronavirus, COVID-19 señala que hay casos reales confirmados de transmisión a perros y gatos por parte de sus dueños y estudios de laboratorio con infección a hurones.
“Respecto a la afectación de animales de compañía, se ha detectado RNA viral en dos perros en Hong-Kong y un gato en Bélgica, con síntomas respiratorios y digestivos, que vivía con una persona enferma de COVID-19”, afirma el texto.
El ministerio se refiere a las informaciones oficiales transmitidas por las autoridades de Hong Kong y de Bélgica y replicadas por la prensa internacional. El primer caso fue un ejemplar de perro pomerano que dio positivo en Hong Kong a principios de marzo.
Las autoridades sanitarias asiáticas realizaron pruebas al perro tomando muestras nasales y orales y dio positivo por coronavirus. Señalaron que pese a ello no tenía síntomas de enfermedad. El informe se comunicó a la OMS el 1 de marzo y está firmado por Thomas Sit, jefe de servicios veterinarios del Departamento de Agricultura, Pesca y Conservación de la región de Hong Kong.
Todo el proceso de seguimiento de este caso puede leerse en la página de la Organización Mundial de la Salud. Con posterioridad, el 12 de marzo, se volvieron a realizar pruebas y esta vez el perro dio negativo así que fue devuelto al dueño, que ya estaba repuesto de la enfermedad. Días después, el perro, que era un ejemplar muy viejo y con enfermedades crónicas, murió, lo que generó titulares erróneos que afirmaban que había muerto por el coronavirus. Las autoridades de Hong Kong explicaron que ese no era el motivo, sino causas naturales.
Las mismas autoridades de Hong Kong informaron a mediados de marzo de un nuevo caso, en este caso un pastor alemán que había sido puesto en cuarentena después de que su dueño contrajera el COVID-19. El perro dio positivo en las pruebas del virus, pero tampoco tenía síntomas clínicos de enfermedad explicaron las autoridades sanitarias de Hong Kong.
Tras a dar a conocer los dos casos, las autoridades de Hong Kong explicaron :»Actualmente no hay evidencias de que las mascotas puedan ser una fuente de contagio del COVID-19 y que virus pueda provocar la enfermedad en canes».
A finales de marzo, se dio a conocer el tercer caso de animal infectado por humano. En este caso se trataba de un gato, una mascota contagiada por su dueño en Bélgica. El estudio completo de este caso está publicado por l’Agence Fédérale pour la Sécurité de la Chaîne Alimentaire de Bélgica.
Estudios de laboratorio con hurones
Al margen de estos casos ocurridos en diversos países, también se han llevado a cabo estudios de laboratorio realizando pruebas para ver la capacidad del virus para transmitirse a distintas especies animales.
“Por otra parte se ha observado en estudios experimentales la infección en gatos y hurones, con replicación activa del virus en vías respiratorias, que también se observó con mucha menor intensidad en perros”, añade el texto de referencia del Ministerio de Sanidad. Se refiere al trabajo liderado por Hualan Chen, del Instituto de Estudios Veterinarios de Harbin (China), y que fue publicado el pasado 31 de marzo.“En cerdos, gallinas y patos no se ha logrado observar replicación activa del virus tras la inoculación experimental. Estos datos indican que podría haber transmisión de humanos infectados a perros, gatos y hurones de forma ocasional y se desconoce si la transmisión podría ocurrir de estos animales a los humanos”, concluye el documento de Sanidad.
El virus, como se ve, no deja de ofrecer novedades sobre su capacidad para saltar entre especies animales. Hasta ahora, hay un cierto consenso sobre su origen. Los estudios filogenéticos revisados hasta la fecha, explica Sanidad, apuntan a que muy probablemente provenga de murciélagos y que de allí haya pasado al ser humano a través de mutaciones o recombinaciones sufridas en un hospedador intermediario, probablemente algún animal vivo del mercado de Wuhan.
Se planteó que este animal pudiera ser el pangolín sin que se haya llegado a una conclusión definitiva aún, puesto que la comunidad científica sigue trabajando en el estudio del nuevo coronavirus.
Sobre un hipotético siguiente paso, que un humano infecte a un animal y este animal a su vez infecte a un humano no hay ningún dato ni evidencia conocido.
