'Ocupados': la inoperancia burocátrica de la Unión Europea en momentos de crisis

‘Ocupados’: la inoperancia burocátrica de la Unión Europea en momentos de crisis

‘Ocupados’: la inoperancia burocátrica de la Unión Europea en momentos de crisis

En este fin de Semana Santa tan extraño y confinado que estamos sufriendo, en nuestra recomendación semanal de El Ágora, voy a proponerte la serie noruega Ocupados, una serie valiente que pone el dedo en la llaga en una situación que estamos sufriendo en nuestras propias carnes como es el papel de la Unión Europea como gestor de grandes crisis


Lorenzo Mejino
Madrid | 10 abril, 2020

Tiempo de lectura: 5 min



No creo que sea una opinión muy impopular decir que las gestiones que está realizando durante esta crisis mundial el ente burocrático en el que se ha convertido la Unión Europea desde su torre de marfil de Bruselas están decepcionando a muchísimas personas y países, que esperaban una acción mas decidida y conjunta para enfrentarnos a esta pandemia que está diezmando nuestra economía.

Pero mi misión no es analizar el problema, del que tienen cumplida información y mucho más precisa con grandes firmas en El Ágora, sino recomendar una serie, Ocupados, que desde la ficción y desde un país como Noruega que no es miembro de la Unión Europea, hace una crítica feroz a dicho organismo, creando una distopia muy interesante que te voy a analizar en el presente artículo.

La trama

Ocupados desarrolla una hipótesis de futuro tan interesante como la ocupación temporal de Noruega por parte de Rusia, con la aquiescencia y el beneplácito de la Unión Europea, para asegurarse la producción y el suministro de gas y petróleo de las plataformas del Mar del Norte.

La causa de la invasión es el cierre de la producción de combustibles fósiles por las políticas medioambientales de un gobierno noruego del partido verde que ha ganado las últimas elecciones con esa promesa en su programa. Su intención es salvaguardar los recursos del planeta por el efecto nocivo del cambio climático en todos los aspectos de la vida, con una trama concebida por el famoso escritor noruego Jo Nesbø. Ese objetivo se muestra desde la preciosa introducción de la serie, una clara denuncia del cambio climático

 

Ocupados desarrolla el tema de la ocupación de terciopelo rusa a tres niveles sociales, el más interesante sin lugar a dudas es el político, con el primer ministro del partido verde, Jesper Berg en el centro del huracán tras decidir cerrar la producción de gas y petroleo y verse obligado a comulgar con ruedas de molino al ver a los rusos llegar y controlar todos sus recursos naturales.

Sus decisiones son muy delicadas, como intentar evitar por todas las maneras un conflicto bélico con Rusia, consciente de que iba a ser una gran masacre para su pueblo, pero su creciente aislamiento tanto dentro de su partido como internacionalmente a causa de la posición de la Unión Europea, le está haciendo pagar un peaje personal muy difícil de soportar.

En un segundo nivel tenemos a los noruegos que se adaptan a la nueva situación y que, sin ser plenamente colaboracionistas, mantienen relaciones con los rusos, como Bente, la dueña de un restaurante con graves problemas económicos o Hans Martin, un escolta del presidente que se debate entre la obediencia debida a sus superiores, obligándolo a proteger intereses rusos, y sus propias ideas personales.

En el centro, Henrik Mestad, protagonista de la serie. A la derecha, Ane Dahl Torp, dueña del restaurante. A la izquierda, Elder Skar, escolta.

Por último tenemos a la resistencia noruega, que quiere expulsar a los rusos de Noruega y que empieza una campaña de sabotajes contra los intereses rusos que pueden dar la excusa perfecta para convertir una ocupación temporal en permanente.

La oposición del primer ministro, el ecologista Peter Berg, a esa injerencia rusa en su territorio, es el centro de las dos primeras temporadas de la serie. La primera desde su puesto de primer ministro noruego y la segunda desde su huida y exilio en Bruselas (igualito que otro presidente que seguro que te ha venido a la cabeza) desde donde intenta recobrar la soberanía nacional en manos de un gobierno títere controlado por la embajadora rusa en Oslo.

Tras las dos primeras temporadas emitidas por la televisión pública noruega NRK, Ocupados cambió de casa, mudándose al canal privado Viaplay. En esta tercera entrega, la historia se centra en que los pobres noruegos han pasado de estar bajo la dominación rusa a estar bajo el control de la Unión Europea, que básicamente solo quiere asegurarse sus fuentes de suministro energético a toda costa.

Seguro que conoces el rechazo frontal del pueblo noruego a la Unión Europea, tras un referéndum en el que rehusaron unirse al proyecto europeo, por lo que no te debe extrañar los palos que los guionistas le dan a lo que consideran como un dinosaurio burocrático con sede en Bruselas.

El apartado político de la serie es realmente apasionante y no deja títere con cabeza, con los cuatro agentes principales (Noruega, Rusia, Unión Europea y USA), culpables de la situación en mayor o menor medida. Además, somos testigos de una escalada de tensiones que la serie desarrolla dedicando cada capítulo a un mes de la ocupación, con saltos temporales entre cada uno de ellos.

Nesbø no es nada condescendiente con los grandes poderes y los critica de lo lindo por sus políticas de hechos consumados y de mentiras al por mayor, huyendo en todo momento de la corrección política.

Desde la pasividad inicial hasta la ocupación actual, Ocupados carga especialmente contra la cohesión de la Unión Europea sin una visión conjunta y con cada uno tirando por su lado, como por desgracia estamos sufriendo con la actual crisis sanitaria que nos tiene confinados en casas y con 27 países tomando decisiones  independientes por su cuenta y riesgo.

Lo actores

El protagonista es el gran actor noruego Henrik Mestad, un actor que era conocido principalmente por su gran visión cómica en numerosos programas televisivos y que en este caso ha sorprendido a propios y extraños con una impresionante interpretación del primer ministro Jesper Berg, un político acorralado por las poderosas fuerzas externas que amenazan su precaria soberanía nacional.

Mestad tiene un personaje muy complicado por llevar hasta las últimas consecuencias el cumplimiento de las promesas electorales que le han llevado al poder y que pueden ser el final de la independencia de su país, por lo que debe ir evolucionando a posiciones más pragmáticas y beligerantes para hacer frente al invasor ruso en primera instancia y el europeo poco más adelante.

Si eres un amante de las series políticas, Ocupados es una cita ineludible en tu calendario seriéfilo, por la originalidad de su arriesgada propuesta, que analizándola en profundidad, tiene varios aspectos medioambientales y políticos que son mas cercanos a la realidad de lo que nos gustaría reconocer.

En mi caso tengo que reconocer que he disfrutado mucho con la serie por hacerme pensar y recapacitar a partir de esa idea de Jo Nesbø, como deseo que te ocurra  si te animas a verla, por lo que te dejo con un gran reportaje que hizo Movistar para su estreno en España.

 


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