La Comisión Europea ha propuesto que se destinen 170 millones de euros del presupuesto de la UE a reforzar la flota terrestre y aérea contra los incendios a partir del verano de 2023, después de registrarse un periodo estival récord de incendios forestales.



Tres semanas después de que la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula Von der Leyen, anunciase en el discurso sobre el Estado de la Unión que se duplicaría la capacidad de extinción de incendios de la UE, el organismo ha realizado la propuesta formal de que se destinen 170 millones del presupuesto europeo a este asunto.
Con esta partida económica, la UE contará con 22 aviones, 4 helicópteros y más equipos terrestres para que, a partir de 2025, se refuerce aún más con la adquisición acelerada de más medios aéreos.
«Los últimos veranos han demostrado claramente que se necesitan más activos de extinción de incendios a nivel de la UE», ha indicado el comisario de Gestión de Crisis, Janez Lenarcic, en un comunicado.
«Si bien los incendios forestales que batieron récords este verano pueden haber sido eclipsados por otras crisis, la propuesta de hoy para reforzar rescEU muestra que el presupuesto de la UE seguirá apoyando a los necesitados», ha agregado el comisario de Presupuesto y Administración Johannes Hahn.
La Unión Europea está asistiendo a un aumento de la frecuencia y la intensidad de los incendios forestales ya que, según los datos disponibles hasta la fecha, hasta octubre la superficie quemada supera ya en un 30% al último peor año registrado, 2017.
En toda la Unión Europea donde entre julio y agosto ardieron 425.000 hectáreas de bosques comunitarios de las que casi el 69%, 293.000 hectáreas, ardieron en los 54 incendios forestales producidos en España, según datos del Sistema Europeo de Información de Incendios Forestales (EFFIS), del programa Copernicus de la Unión Europea.
Esta temporada, el Centro de Coordinación de Respuesta a Emergencias recibió 11 solicitudes de asistencia por incendios forestales y se desplegaron 33 aviones y 8 helicópteros en toda Europa a través del Mecanismo de Protección Civil de la UE, a los que se unieron más de 350 bomberos sobre el terreno.
