España invertirá en los próximos dos años 700 millones de euros en la modernización de 100.000 hectáreas de regadío, 563 millones a cuenta de los fondos de reconstrucción y el resto con aportaciones de los regantes



El Plan de Reconstrucción, Transformación y Resiliencia de España contará con 1.051 millones de euros procedentes de los Fondos Europeos de reconstrucción para el sector agroalimentario y pesquero para los próximos tres años, una de las partidas más importantes se destinará a la modernización de 100.000 hectáreas de regadío para lo que se invertirán un total de 700 millones de euros entre 2021 y 2022, 563 millones de los fondos europeos y el resto aportaciones privadas de las comunidades de regantes.
El plan se basa en cuatro pilares fundamentales: la mejora de la eficiencia en regadíos; el impulso de la sostenibilidad y competitividad de la agricultura y la ganadería; una estrategia de digitalización del sector agroalimentario y del medio rural, así como la modernización del sector pesquero, a través del impulso de la sostenibilidad, investigación, innovación y digitalización, según explicó esta mañana el Ministro de Agricultura, Luis Planas.
Habrá, once proyectos de inversión, cinco ligados al sector agrario y seis al pesquero, y se llevarán a cabo, además, seis reformas, cinco agrarias y una pesquera; «una firme apuesta y compromiso del Gobierno por impulsar uno de los sectores estratégicos de nuestro país«, según Planas.
El Ministro ha destacado que las actuaciones previstas dentro del plan van a movilizar una inversión total de más de 1.500 millones de euros, incluyendo los 1.051 millones de euros del mecanismo de recuperación y otras fuentes de financiación pública y privada, «una gran oportunidad para el sector agroalimentario y pesquero, un sector que va a estar en el centro de la recuperación, al igual que ha estado en primera línea durante la pandemia al garantizar a los ciudadanos el suministro de alimentos sanos y en cantidad suficiente».
Además, ha apuntado que estas actuaciones se orientan especialmente a la agricultura y ganadería familiares, ya que tienen mayores dificultades para acometer determinadas reformas.
La Transformación ambiental y digital del sector agroalimentario y pesquero logrará, entre otros objetivos modernizar 100.000 hectáreas de regadíos de las que se beneficiarán 100 comunidades de regantes, con una inversión total de 700 millones de euros (a los 563 millones del plan se sumarán cerca de 140 millones de inversión privada); mejorar la bioseguridad de unos 230 viveros (más de la mitad de los potenciales beneficiarios) y 240 centros de limpieza y desinfección.
Además pretende movilizar más de 570 millones de euros (de los que unos 270 millones de euros se corresponderán a capital privado) en una modernización y mejora de las explotaciones vinculadas a la agricultura de precisión, la eficiencia energética y la economía circular, incluyendo un plan de ayudas para la modernización integral de invernaderos; y potenciar el desarrollo tecnológico e innovación en pesca y acuicultura.
Ahorro de agua y energía
El Plan para la mejora de la eficiencia y la sostenibilidad en regadíos, fundamental para adaptarlos a los recursos disponibles a largo plazo, contará con 563 millones de euros que se ejecutarán a través de la Sociedad Estatal de Infraestructuras Agrarias (Seiasa).
Las inversiones previstas se ejecutarán con un esquema de financiación público-privada 80% 20% de manera que las comunidades de regantes aporten 137 millones de euros para completar la inversión total prevista de 700 millones de euros.
Para la ejecución el Ministerio firmará dos convenios de colaboración con la SEIASA para encomendar las actuaciones y fijar las condiciones y esta a su vez firmará convenios específicos con los regantes, y encargará las obras a TRAGSA o serán licitadas.
Estas inversiones en modernización de regadíos responden a las exigencias del Reglamento de Recuperación y Resiliencia de contribución a los objetivos climáticos y medioambientales al tratarse de actuaciones con elevado impacto de sostenibilidad ambiental y priorizará entre otras actuaciones la sustitución de aguas superficiales y/o subterráneas por aguas no convencionales (como son las aguas regeneradas y desalinizadas).
También financiará actuaciones que generen mayor ahorro de agua o consigan una mayor disminución de la demanda de agua o un mayor ahorro energético, así como actuaciones con impacto energético: Energías renovables y la inclusión de nuevas tecnologías.
El plan agroalimentario
Dentro del PRTR, el diseño para el sector agroalimentario incluye cinco reformas y cinco grandes líneas de inversión. Una de las inminentes reformas es el impulso a la gobernanza y a la gestión sostenible de los regadíos españoles. Para que todos los representantes de los sectores afectados puedan cooperar en aquellos aspectos relacionados con el regadío español y la creación del Observatorio de la Sostenibilidad del regadío en España.
También se va a modificar la normativa reguladora de las relaciones comerciales en la cadena alimentaria. Un compromiso que se está cumpliendo, según ha indicado Planas, y está dotando de mejor posicionamiento negociador a los eslabones más débiles de la cadena, que cuentan con un marco de protección mejorado que asegura, también, transparencia generación de valor.
Otra reforma afectará al desarrollo y revisión del marco regulatorio en materia de sostenibilidad ambiental de la ganadería. Para facilitar la aplicación delas políticas medioambientales con una mayor precisión, mediante la regulación de la ordenación de las explotaciones de los sectores ganaderos.
Se abordará el marco legislativo sobre la nutrición sostenible en los suelos agrícolas. Como forma de ayudar a lograr los objetivos de lucha contra el cambio climático, para mejorar la calidad del agua, del aire, del suelo y de la biodiversidad. Y se ejecutará el II Plan de Acción de la Estrategia de Digitalización del sector agroalimentario y del medio rural.
Por su parte, las inversiones dotarán al Plan de impulso de la sostenibilidad y competitividad de la agricultura y la ganadería. Con tres inversiones diferenciadas: 10 millones de euros para la modernización de los laboratorios de sanidad animal y vegetal; 38 millones de euros para reforzar los sistemas de capacitación y bioseguridad en viveros y explotaciones ganaderas y 307 millones de euros para inversiones en agricultura de precisión, eficiencia energética y economía circular.
El Plan de reconstrucción permitirá impulsar la Estrategia de Digitalización del Sector Agroalimentario y Forestal y del Medio Rural. Con una dotación de 38 millones de euros, será una de las claves de futuro, según ha indicado Luis Planas, pues en ella se apoyan tanto la transformación como la atracción de talento, el emprendimiento y el relevo generacional.
El Plan pesquero
En el ámbito pesquero hay prevista una reforma consistente en la revisión profunda del marco normativo nacional y que incluye la ley de pesca sostenible e investigación pesquera; ley de modernización del control e inspección y régimen sancionador en el ámbito de la actividad pesquera; y real decreto para la ordenación de los diferentes artes, modalidades y censos de los caladeros nacionales.
Por lo que respecta a las inversiones, son seis los proyectos a financiar, la modernización de la Red de Reservas Marinas de Interés Pesquero. Con actuaciones por valor de 9,9 millones de euros, tanto para la ampliación de la red como para la modernización del control y seguimiento de las actividades que se realizan en ella.
El impulso de la investigación pesquera y acuícola y apoyo a la formación. Para lo que se destinarán 14,1 millones de euros a la modernización de los buques oceanográficos, la suscripción de convenios con centros de investigación y la formación.
El desarrollo tecnológico e innovación en el sector pesquero y acuícola. Dotado con 11 millones de euros para establecer partenariados público-privados para el impulso de la economía azul y también apoyar proyectos de desarrollo tecnológico e innovación y de mejora de la trazabilidad de los productos pesqueros. La digitalización y uso de Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC) en el sector pesquero. Con el fin de asegurar el cumplimiento de la Política Pesquera Común, lo que requiere la inversión en nuevas tecnologías de cara a mejorar el desarrollo de la actividad. Contará con 11 millones de euros.
Todas estas reformas e inversiones, de acuerdo con las explicaciones del ministro, deben contribuir decisivamente a la transformación y digitalización del sector agroalimentario y pesquero, y todo ello en torno a los cuatro ejes transversales del PRTR del Gobierno: la transición ecológica, la transformación digital, la igualdad de género y la cohesión social.