Tras numerosos retrasos y dos años después de lo programado, por fin se ha cerrado la fecha de la segunda parte de la Conferencia de las Partes de la Convención sobre Diversidad Biológica de las Naciones Unidas que traslada su sede de China a Canadá



La segunda parte de la Conferencia de las Partes de la Convención sobre Diversidad Biológica (COP15) de las Naciones Unidas, cambia nuevamente de fecha y lugar. La COP 15, que debía celebrarse en abril de este año en la ciudad meridional china de Kunming, y luego se habló de retrasarla a agosto, tendrá lugar finalmente en Montreal, en Canadá, entre los próximos 5 y 17 de diciembre, informaron este martes los organizadores.
«Doy las gracias al Gobierno de Canadá, como anfitrión de la Secretaría (de la Convención sobre la Diversidad Biológica, o CBD en inglés) por proporcionar una localización en Montreal para esta reunión crucial», dijo a través de un comunicado difundido hoy Elizabeth Maruma Mrema, secretaria ejecutiva de la CBD, con sede en el país norteamericano.
A pesar del cambio de localización, China seguirá ocupando la presidencia de la COP15, después de que Kunming fuera la sede oficial de la primera parte de la reunión, prevista inicialmente para 2020 pero pospuesta a octubre de 2021 por la pandemia de la covid-19.
Durante esa cumbre se aprobó la Declaración de Kunming, por la que los gobiernos participantes asumieron diferentes compromisos, como «fortalecer las leyes medioambientales nacionales y su cumplimiento para proteger la biodiversidad» o «la reforma o eliminación de subsidios que son dañinos para la biodiversidad».
Además, China prometió la creación de un fondo para la conservación de la biodiversidad en países en vías de desarrollo por valor de 1.500 millones de yuanes (unos 200 millones de euros).
Un encuentro por la biodiversidad
El objetivo de la segunda entrega de la COP15 es la aprobación del Acuerdo Global sobre Biodiversidad que arranca su cuarta y última ronda de negociaciones este martes en Nairobi, donde tiene su sede el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA).
La cuarta y última ronda de negociaciones sobre el borrador del acuerdo global sobre biodiversidad es una antesala a la COP15, prevista para diciembre en Montreal (Canadá). Las negociaciones tendrán lugar hasta el 26 de junio en la capital keniana y tiene como objetivo establecer mecanismos para preservar la biodiversidad y aborda las principales amenazas para su pérdida, que incluyen el cambio climático, la contaminación, las especies invasivas y los organismos genéticamente modificados, la explotación insostenible y el uso inadecuado de la tierra y las aguas.
Durante la última ronda de negociaciones, que tuvo lugar en Ginebra en marzo de este año, se avanzó en recomendaciones para la conservación de la biodiversidad marina y costera y en una iniciativa para la conservación y el uso sostenible del suelo, entre otros temas. El acuerdo también incluye la movilización de recursos y la secuenciación de material genético, entre otros aspectos. Sin embargo, al cierre del encuentro los organizadores admitieron que los distintos gobiernos aún diferían sobre las prioridades y los plazos.
La Convención de Biodiversidad, en cuyo marco se llevan a cabo estas negociaciones nació en la Cumbre de la Tierra de Río de Janeiro en 1992, entró en vigor en 1993 y cuenta con 196 países firmantes. Ahora, busca adaptarse con nuevos documentos vinculantes a los retos de la actualidad, incluido el cambio climático.
Esta convención cuenta con dos acuerdos suplementarios de importancia: el Protocolo de Cartagena sobre Bioseguridad, que intenta responder a los desafíos y posibles peligros de la biotecnología, y el Protocolo de Nagoya, que fomenta la cooperación en investigación genética en este campo.
