Bruselas trabaja desde años para sentar las bases científicas que evidencien el efecto contaminante que la munición de plomo que usan los cazadores tiene sobre las aves. El próximo octubre se espera la propuesta de restricción en humedales, pese a las reticencias de los aficionados de la actividad cinegética y entre los aplausos de las organizaciones ambientalistas.
Durante décadas, el plomo se ha utilizado de forma habitual en munición y aparejos de pesca. Se estima que cada año se liberan al medio ambiente en la Unión Europea entre 21.000 y 27.000 toneladas de plomo procedente de dichos usos.
Se sabe que la utilización de balas y perdigones de plomo o de aparejos de pesca que contienen plomo intoxica a la fauna silvestre, por ejemplo, las aves. Además, la evidencia científica apunta a que el plomo residual presente en las presas abatidas con munición de plomo también puede afectar a la salud humana.
Se estima que cada año se liberan al medio ambiente en la Unión Europea entre 21.000 y 27.000 toneladas de plomo procedente de la caza
Tras recibir la opinión de la Agencia Europea de Sustancias y Mezclas Químicas (ECHA), la Unión Europea ha comenzado un proceso legislativo para modificar un anexo del Reglamento europeo relativo al registro, evaluación, autorización y restricción de las sustancias y mezclas químicas (REACH), que afecta a la prohibición del uso del plomo en humedales, una decisión que notificará el próximo mes de junio.
¿Cómo contamina el plomo?
Solo una pequeña proporción de los perdigones de plomo disparados alcanzan su objetivo. El resto son perdigones de plomo «gastados» que se liberan al medio ambiente, donde pueden ser ingeridos involuntariamente por las aves, que los confunden con comida o con las pequeñas piedras que comen para triturar el alimento en la molleja.
La ingestión de los perdigones de plomo gastados se ha constatado en numerosas especies de aves acuáticas (como patos, gansos y cisnes) y también se ha confirmado en otras especies de aves.
Tras ingerir el perdigón de plomo, este se descompone rápidamente en pequeñas partículas (en la molleja), lo que incrementa su biodisponibilidad.
Actualmente se liberan a los humedales de la UE unas 5.000 toneladas de perdigones de plomo al año
Además, las especies carroñeras o predadoras, como las aves rapaces, consumen involuntariamente fragmentos de plomo presentes en los tejidos de las presas (tras haber sido heridas con un perdigón de plomo) o en los órganos internos de una presa de mayor tamaño (por ejemplo, un ciervo) que se desechan tras el «procesamiento de la canal» sobre el terreno.
Esta vía de exposición se denomina «intoxicación secundaria» y también se sabe que a menudo tiene como consecuencia el envenenamiento con plomo de la fauna silvestre.
Se estima que actualmente se liberan a los humedales de la UE unas 5.000 toneladas de perdigones de plomo al año como consecuencia de la caza y el tiro deportivo.
La ECHA calcula que esto conlleva la muerte no intencionada, debido a la intoxicación por plomo, de aproximadamente un millón de aves acuáticas al año en toda la UE.
Además, se calcula que cada año se liberan al medio terrestre aproximadamente 14.000 toneladas de munición de plomo y esta liberación se traduce en la muerte no intencionada de entre uno y dos millones adicionales de aves cada año.
Los pesos pesqueros liberan al medio acuático entre 2.000 y 6.000 toneladas de plomo adicionales.
Los cazadores se sienten cazados
Para los cazadores, las propuestas de la Comisión han sido «muy controvertidas» entre los Estados miembro, porque se plantean dificultades a la hora de definir qué es un humedal y, en su opinión se atenta contra la presunción de inocencia de los cazadores, o incluso, se han planteado problemas respecto a la adecuada traducción de la terminología, como, por ejemplo, la palabra «munición».
Sin embargo, denuncian presiones y explican que la Dirección General de Medio Ambiente de la Comisión Europea ha hecho circular una información para los miembros del Grupo de Expertos de la Directiva de Aves (NADEG), donde los invitan «a contactar con las autoridades pertinentes a cargo de la Comisión REACH para aumentar su concienciación acerca del problema y para asegurar el voto positivo en el borrador de la regulación de la Comisión».
La Real Federación Española de Caza RFEC denuncia que las entidades ecologistas siguen presionando para prohibir la utilización del plomo en los cartuchos de caza y opina que esto tiene un «trasfondo ideológico cuyo único propósito es acabar con la actividad cinegética» en España, a pesar de que «está demostrado científicamente que la utilización del plomo no tiene incidencia en las especies cinegéticas, y a pesar del enorme impacto económico que tendría».
Afirman que en la actualidad no hay un sustituto de la munición de plomo disponible para el desarrollo de una caza «sostenible y ética» de acuerdo con las normativas sobre su uso en la actividad cinegética basada en informes científicos y no «en meras cuestiones ideológicas».
Sin embargo, están a favor de limitar el uso de perdigones en humedales y a aplicar las normas limitativas razonables para que no se causen perjuicios innecesarios a los cazadores y mantener la sostenibilidad del mundo rural.
¿Hay alternativas al plomo?
La restricción de la munición a base de plomo no es una novedad. Muchos Estados miembros de la UE o regiones dentro de los mismos ya la han prohibido. La experiencia de estos países en los que existe una prohibición ya ha demostrado que los cazadores y tiradores deportivos han podido adaptarse al uso de materiales alternativos sin experimentar dificultades significativas en cuanto al rebote y la seguridad.
La efectividad del acero (hierro dulce) ha mejorado de forma significativa desde su introducción. Los estudios de campo han demostrado que los cazadores que utilizan perdigones de acero pueden obtener los mismos resultados que los que usan perdigones de plomo.
La distancia de disparo efectiva para los perdigones modernos de acero concuerda con el rango al que se efectúa la caza de aves habitualmente. Sin embargo, para algunas especies de aves anseriformes de mayor tamaño, como los gansos, pueden ser necesarias escopetas compatibles con cartuchos de acero de alto rendimiento.
Los estudios demuestran que el rebote se produce tanto con perdigones de acero como de plomo. La experiencia extraída de Dinamarca y los estudios realizados en Alemania indican que no existe un aumento del riesgo de sufrir accidentes o lesiones debido al rebote cuando se utilizan perdigones de acero respecto al uso de plomo.
También pueden utilizarse perdigones a base de bismuto o wolframio como alternativa al plomo y tienen la ventaja de que pueden usarse en cualquier escopeta, incluso las más antiguas en las que no puede utilizarse acero.
Los estudios de campo realizados en Alemania han demostrado que utilizar munición sin plomo puede ser tan efectivo como cazar con plomo.
La munición sin plomo para rifles está disponible en el mercado europeo en una amplia gama de calibres, adecuados para la mayoría de las circunstancias de caza en Europa.
Los nuevos avances en aparejos de pesca también han demostrado que ahora existe una mayor disponibilidad de alternativas a los pesos y lastres de plomo.
Los cartuchos sin plomo son adecuados para todo tipo de caza y tiro y se utilizan en gran medida en la UE .
Los precios actuales de los perdigones de acero y plomo son similares. Los cartuchos a base de bismuto y wolframio, que actualmente se fabrican, venden y utilizan en volúmenes mucho menores, son aproximadamente entre cuatro y cinco veces más caros que los cartuchos de plomo y probablemente sigan siendo más caros que los cartuchos de plomo (y de acero).
La investigación ha demostrado que comprar balas sin plomo conlleva un coste ligeramente superior, pero no está previsto que este aumento del precio resulte prohibitivo.
