La Sociedad Holandesa para la Conservación de la Naturaleza lleva trabajando varios años en la construcción de islas para recuperar la biodiversidad perdida por la acción del hombre en el lago Marker



La mano del hombre ha sido causante de muchos fenómenos adversos en la tierra. El principal de ellos ha sido el cambio climático, que afecta directamente a nuestro planeta. Sin embargo, el ser humano también es responsable de llevar muchos proyectos de mejora del planeta, ya sea por revertir sus errores o, simplemente, hacer de la Tierra un lugar mejor para las especies que lo habitan.
En este último aspecto destaca el proyecto Marker Wadden. Un plan miembro de la European Rewilding Network (ERN) y supervisado por la Sociedad Holandesa para la Conservación de la Naturaleza (Natuurmonumenten) que pretende devolver la diversidad biológica a una zona maltratada por la acción del hombre.
Este proyecto se desarrolla en el lago Marker (Markermeer), una de las superficies de agua dulce más grande de Europa Occidental. Esa zona, tras el abandono de un proyecto de recuperación de tierras en la década de 1980, se convirtió en un activo ecológico y recreativo, dentro de la Red Natura 2000.
Sin embargo, durante las últimas décadas el lago sufrió diversas remodelaciones que provocaron que los sedimentos que transportaba se quedasen estancados en la masa acuática. El resultado fue desastroso para la biodiversidad.
Para poder solucionar el problema, en el 2012 el gobierno holandés puso en marcha un plan de acción que, según la ERN, fue simple pero ambicioso: crear un archipiélago de islas de 10.000 hectáreas en el lago utilizando el sedimento estancado como principal material para construir las masas de tierra.
Para la ERN, el proyecto además fue innovador desde un punto de vista ecológico al usar enteramente recursos del propio entorno. De este modo lograron construir un nuevo ecosistema a la par que eliminaban las impurezas del anterior.
Con la primera isla ya creada en el 2016, el gobierno holandés espera que para el 2020 el complejo natural esté completamente operativo, ya no solo para los animales, principalmente aéreos, sino para que las personas puedan disfrutar del entorno a través de rutas acuáticas y senderos.
Otros proyectos dentro de la ERN
El Marker Wadden es solo una de las iniciativas de reconstrucción que existen en los más de 20 países europeos que forman parte de European Rewilding Network, compuesta por 68 iniciativas. En la península ibérica, concretamente en Portugal, destaca “el área de reconstrucción ibérico Occidental”. Este tiene como objetivo la repoblación de la zona con vida silvestre que sea beneficiosa tanto para el ecosistema como para la economía local.
En España existen otros de menor envergadura, pero enmarcados dentro de los objetivos de reconstrucción de la ERN. En Galicia, por ejemplo, se lleva a cabo una tarea de reconstrucción que tiene como objetivo eliminar el impacto que la minería llevó a cabo en la zona durante el siglo pasado. Mientras, Riaño, en Castilla y León, acoge una iniciativa para solucionar el conflicto entre ganaderos y lobos a través de la recaudación de dinero del turismo que están impulsando.
