Si el clima global sigue calentándose al ritmo actual, los pingüinos emperador en la Antártida experimentarán una disminución del 86% para el año 2100. Aunque se consiga que la subida de la temperatura sea solo de 2 grados la población de la especie se recortará en un 31%



El calentamiento global es un hecho incuestionable al que la humanidad debe enfrentarse con urgencia si no quiere ver cambiar drásticamente el planeta. Las implicaciones más inmediatas son el aumento de las temperaturas, el cambio en los patrones climáticos, la subida del nivel del mar y la extinción de miles de especies.
En este sentido, una investigación publicada en Global Change Biology ha alertado de que un clima cada vez más cálido puede exterminar para fin de siglo a uno de los animales icónicos de la Antártida, el pingüino emperador (Aptenodytes forsteri).
«Si el clima global sigue calentándose al ritmo actual, esperamos que los pingüinos emperador en la Antártida experimenten una disminución del 86% para el año 2100. En ese momento, es muy poco probable que se recuperen”, alerta en un comunicado Stephanie Jenouvrier, ecóloga de aves marinas y autora principal del artículo.
La investigación, en la que ha participado un equipo internacional de científicos coordinado por el Woods Hole Oceanographics Institution (WHOI), explica que el destino de los pingüinos está ligado en gran medida al destino del hielo marino, ya que estos animales lo usan como base de origen para la cría y la muda. Los pingüinos emperador tienden a construir sus colonias en hielo con condiciones extremadamente específicas: debe estar encerrado en la costa del continente antártico, pero lo suficientemente cerca como para abrir el agua de mar para que las aves tengan acceso a alimentos para ellos y sus crías.
Sin embargo, a medida que el clima se calienta, el hielo marino desaparecerá gradualmente, privando a las aves de su hábitat, fuentes de alimentos y la capacidad de incubar polluelos.
Modelos climáticos
Jenouvrier y su equipo realizaron el estudio combinando dos modelos informáticos existentes. El primero, un modelo climático global creado por el Centro Nacional de Investigación Atmosférica (NCAR), ofrecía proyecciones de dónde y cuándo se formaría hielo marino bajo diferentes escenarios climáticos. El segundo, un modelo de la propia población de pingüinos, calculó cómo las colonias podrían reaccionar a los cambios en ese hábitat de hielo.
Los investigadores ejecutaron el modelo en tres escenarios diferentes: un futuro donde la temperatura global aumenta en solo 1,5 grados (el objetivo establecido por el acuerdo climático de París), uno donde las temperaturas aumentan en 2 grados y otro donde no se toman medidas para reducir el cambio climático, lo que provoca un aumento de la temperatura de 5 a 6 grados centígrados.
En el escenario de 1,5 grados, el estudio encontró que solo el 5% del hielo marino se perdería para el 2100, causando una caída del 19% en el número de colonias de pingüinos.
Sin embargo, si el planeta se calienta 2 grados, esos números aumentan dramáticamente: la pérdida de hielo marino casi se triplica, y más de un tercio de las colonias existentes desaparecen. «Bajo ese escenario, los pingüinos estarán marchando hacia la extinción durante el próximo siglo», advierte.
