El Programa de Cría en Cautividad del Lince Ibérico sigue cosechando éxitos. En la última semana y media han nacido trece cachorros en centros situados en Doñana (Huelva) y Cáceres y se espera que esta temporada nazcan hasta 45 ejemplares



El lince ibérico continúa con su paulatina recuperación. El Ministerio para la Transición Ecológica ha anunciado el nacimiento de tres nuevos cachorros el pasado sábado en el centro de Zarza de Granadilla (Cáceres), gestionado por el Organismo Autónomo Parques Nacionales (OAPN). En total, en esas instalaciones y en las de El Acebuche, en la zona de Doñana que se sitúa en Huelva, han nacido 15 cachorros, de los que 13 siguen adelante, en los últimos diez días.
Estela. Así se llama la hembra de lince ibérico que ha dado a luz a tres cachorros en Cáceres. Con su parto, que sigue a los de Kolia y Omeya, son ya siete los cachorros nacidos en dicho centro en 2020 y aún se esperan dos posibles partos más, uno a mediados de abril de la hembra Elipse y otro sobre el 20 de mayo de Hechicera.
A estos nacimientos hay que sumar los acontecidos en El Acebuche, en Doñana. Allí, el primer parto fue el de Gitanilla, con dos cachorros, a los que hubo que sumar casi inmediatamente los de las hembras Nársil y Nota, que tuvieron cada una tres crías, si bien los dos de Nota murieron a los pocos días de nacer. Aunque también se espera un parto más para el 8 de mayo, los trece cachorros nacidos esta semana y media suponen un dato muy bueno que da cuenta del éxito del Progama de Cría en Cautividad del Lince Ibérico, que se coordina de forma conjunta entre España y Portugal.
En total, en la presente temporada de cría se han emparejado 26 hembras reproductoras, una menos que en el año 2019, cinco de ellas en Zarza de Granadilla (Cáceres), seis en El Acebuche (Doñana), ocho en La Olivilla (Jaén), una en el Zoo de Jerez y seis en Silves (Portugal). Se espera que estos emparejamientos produzcan a lo largo de 2020 entre 37 y 45 cachorros.


La mayor parte de los ejemplares que nazcan en 2020 -alrededor del 90%- serán preparados para su liberación en el medio natural y el resto pasará a formar parte de la población reproductora del programa de cría, con objeto de mantener una adecuada diversidad genética y equilibrio demográfico, explica el comunicado.
En la pasada temporada de cría, salieron adelante 35 de los 50 cachorros nacidos en cautividad, 29 de los cuales han sido liberados en los primeros meses de 2020 en Andalucía, Castilla-La Mancha, Extremadura y Portugal. Con la suelta de estos 29 ejemplares, se ha alcanzado la cifra de casi 280 animales liberados en el medio natural, lo que duplica las estimaciones iniciales que se establecieron en Plan de Acción para la cría en cautividad del lince ibérico e indica la buena salud de la que goza actualmente el programa para recuperar un animal que hace dos décadas estuvo a punto de extinguirse.
