El temporal Alex someterá a la península y a Baleares durante los próximos días a un intenso viento y oleaje que vendrán acompañados de un descenso generalizado de las temperaturas y precipitaciones fuertes y persistentes



Arranca la cuarta temporada de nombramiento de borrascas de gran impacto en los países del suroeste de Europa. Lo hace con Alex, un intenso temporal que someterá a la península y a Baleares, desde este jueves y hasta el inicio de la próxima semana, a fuertes rachas de viento acompañadas de un descenso generalizado de las temperaturas y precipitaciones fuertes, persistentes y puntualmente tormentosas. Así lo ha anunciado la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, que avisa de que esta ciclogénesis explosiva tiene la capacidad de producir un gran impacto en bienes y personas, aunque detallará el alcance del riesgo en los próximos días.
Para permitir al público un mejor seguimiento de estos fenómenos meteorológicos AEMET estrena, además, un nuevo formato de visualización del nombramiento de estas borrascas de gran impacto. El objetivo es aunar, en una única imagen, información tanto de qué borrascas han sido nombradas como, mediante un código de colores, la evolución de la temporada. Los nombres se han dispuesto en círculo en sentido antihorario para emular el movimiento de las borrascas en el hemisferio norte. Al nombrarse una de ellas, el círculo que la contiene adquirirá el color del mes en que se ha producido tal nombramiento, integrando así en la imagen información temporal.


Concretamente, el listado de nombres para esta nueva temporada de borraascas 2020-21 preestablecidos por los 4 organismos denominados Grupo Suroeste contempla opciones que van desde Paula a Filomena pasando por Hortense o Ignacio.
Una borrasca o depresión es un sistema de bajas presiones que suele llevar asociados vientos fuertes o muy fuertes, que serán más intensos cuanto menor sea el mínimo de presión en el centro de la baja. Las borrascas a las que se dará nombre serán aquellas que se profundicen de tal manera que puedan producir un gran impacto en bienes y personas, aunque no será necesario que experimenten un proceso de ciclogénesis explosiva, como es el caso de Alex.


Por el momento, una borrasca recibirá un nombre propio sólo cuando se prevean condiciones que den lugar a la emisión de avisos de viento (en el caso de AEMET, racha máxima) de nivel naranja o rojo orientados a impactos asociados a dicha baja en alguno de los cuatro países del Grupo Suroeste.
