El ‘Black Friday’ provocará en España un aumento de las compras de hasta un 400% más que en un viernes cualquiera, fomentando un consumo masivo de recursos naturales, plásticos y combustibles fósiles que choca especialmente en la era del cambio climático

Descuentos irresistibles y millones de paquetes volando de un lado al otro del planeta. Ofertas asombrosas y productos envueltos y protegidos con mil plásticos. Ahorro familiar y consumo desenfrenado. Los ciudadanos del siglo XXI parece que no se pueden resistir a los chollos, aunque sea por el bien del planeta. El Black Friday, que provocará este viernes en España un aumento de las compras de hasta un 400% con respecto a un día normal, tiene un alto coste medioambiental: los 200 euros que de media gastará cada español equivalen a la emisión de unos 80 kilogramos de CO2 por persona.
En este “Viernes Negro”, jornada maratoniana de consumo con descuentos que se ha instalado en España, se registrará “hasta un 400% más de compras que el pasado viernes” y se enviarán 3,5 millones de paquetes porque el “74% de los españoles afirma que comprará algún producto”. Sin embargo, si cada español se ahorrase el consumir durante el Black Friday, “tendría el mismo efecto positivo que 4.000 árboles absorbiendo dióxido de carbono (CO2) durante un día completo”, según estimaciones de la aplicación de trueque Gratix.
Según varios expertos consultados por EFEverde, la compra excesiva, y a veces innecesaria, conlleva el consumo masivo de recursos naturales, el uso de plásticos y envoltorios exagerados e importantes costes en los procesos de producción y en el transporte para que cada producto llegue al comercio y al cliente en tiempo y hora. Es decir, los beneficios que esto reporta para consumidores y empresas tiene un “alto coste medioambiental”.
Más información
El coste ambiental del Día del Soltero
La basura entendida como un recurso en vez de un problema
La transición hacia una economía circular se estanca
Manifestación en Madrid
Ante la emergencia climática que supone el calentamiento global, cada vez hay más ciudadanos que alzan la voz contra el dispendio material que supone el Black Friday. Juventud por el Clima, impulsor del movimiento Fridays For Future en España, se manifestará este viernes en una veintena de ciudades españolas precisamente para protestar contra el actual modelo de consumo y exigir a los gobiernos y empresas una conducta responsable respecto al modelo de consumo actual.
Fridays For Future denuncia, entre otras cosas, que las empresas no se hacen responsables de los daños que causan al planeta, son las únicas beneficiarias de esta oleada de ingresos y consumo y recuerda que entre el año 2000 y el 2014 la producción de ropa se duplicó y se estima que cada español se desprende de 7 kilos de ropa anuales. “La responsabilidad también debería recaer en las empresas, ya que como sociedad no tenemos suficiente consciencia ambiental para luchar contra este tipo de jornadas que son medioambientalmente insostenibles para el planeta“, lamenta la profesora Soler.
También, para contrarrestar esta jornada, Ecologistas en Acción lleva 15 años organizando una huelga de consumo, “un día sin compras este viernes y un consumo crítico durante los 364 días restantes” y critica que el “Viernes Negro” va “contra el pequeño comercio y la vida local”.
La próxima semana, una vez iniciada la Conferencia de las Partes de la Convención Marco de Cambio Climático (COP25), Juventud por el Clima participará en diferentes actos, tanto fuera como dentro del evento. Además, el 6 de diciembre, tanto Juventud por el Clima como numerosas ONG de todo el mundo celebrarán en Madrid una marcha pacífica para exigir a los gobiernos de cerca de 200 países que eleven la acción climática. La “gran” manifestación partirá el viernes 6 de diciembre a las 18.00 desde Atocha.