Según datos del Ministerio de Transición Ecológica, las emisiones de dióxido de carbono se redujeron en España el año pasado más de un 2% respecto a 2017 gracias, principalmente, al crecimiento de la generación renovable, destacando la eólica y la hidráulica, que tuvo un crecimiento interanual del 85%



La emisiones españolas de dióxido de carbono (CO2) alcanzaron en 2018 las 295 millones de toneladas netas, lo que supuso una disminución de más del 2% respecto a 2017. La reducción anual se debió, principalmente, a un descenso de más del 15% en las emisiones vinculadas a la generación eléctrica por el aumento de la generación hidráulica y renovable.
Entre los datos ofrecidos por el Ministerio para la Transición Ecológica (MITECO) como avance del Inventario de Emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI), destaca el crecimiento de la energía hidráulica casi un 85% respecto a 2017, gracias a que fue un año hidrológicamente húmedo. La energía hidroeléctrica supuso un 13,2% respecto al total de generación. Por su parte, la producción eólica se incrementó en un 3,5% y alcanzó un 19%, según el informe de Red Eléctrica de España.
La subida de fuentes renovables permitió rebajar la producción de ciclos combinados (-18,9%), carbón (-17,2%), y la que emplea combustibles líquidos (-4,5%).
Sectores más contaminantes
Por sectores, el transporte fue el que generó el mayor porcentaje de emisiones totales de GEI, con un aumento de un 2,7%. El transporte por carretera representó un 25% del total de emisiones, mientras que se estima que un tercio de estas se generaron en aglomeraciones urbanas.
El segundo puesto lo ocupa el sector de la industria (con un 19% de las emisiones totales, un 2% más que el año anterior), seguida de la generación de electricidad (17%), la agricultura en su conjunto (12%), el consumo de combustibles en los sectores residencial, comercial e institucional (9%) y los residuos (4%).
Las emisiones procedentes de la agricultura no varían respecto a 2017, dado que se compensa la subida de las emisiones ganaderas (+1,4%) con la bajada de las procedentes de cultivos (-2,5%).
En términos generales, las emisiones procedentes de sectores sujetos al sistema europeo de comercio de derechos de emisión (ETS, en su acrónimo inglés), que suponen un 38,2% del total, disminuyeron un 6,6 % en 2018.
Por su parte, las emisiones no sujetas al sistema aumentaron un 0,6%, un porcentaje que agrupa a las emisiones del ámbito residencial, comercial e institucional; el transporte; el agrícola y ganadero; la gestión de residuos; la industria no sujeta al comercio de emisiones y los gases fluorados.
