La Organización Meteorológica Mundial alerta de que las olas de calor serán cada vez más frecuentes e intensas al menos hasta 2060, aunque las acciones de mitigación del cambio climático tengan éxito



La ola de calor e incendios que atraviesa Europa está en el punto de mira de organizaciones meteorológicas, sanitarias y climáticas internacionales. Por su crudeza, extensión y duración esta ola de calor está siendo vista como ejemplo y preludio de lo que espera al planeta en los próximos años a causa del cambio climático.
La Organización Meteorológica Mundial (OMM) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) de las Naciones Unidas convocaron este martes una rueda de prensa para analizar este episodio de temperaturas extremas que está dejando miles de muertos y cientos de miles de hectáreas quemadas en toda Europa.
El secretario general de la OMM, Petteri Taalas, advirtió que olas de calor como la que estamos viviendo serán cada vez más frecuentes y más intensas al menos hasta 2060. «Este tipo de olas de calor serán normales o incluso más fuertes. La mayor frecuencia de estas tendencias continuará al menos hasta 2060, independientemente del éxito o no a la hora de mitigar el cambio climático«, subrayó el experto, quien debido al calor que también se sufre en Ginebra, con temperaturas en torno a los 37 grados, prescindió de la chaqueta propia de estos eventos y dio la rueda de prensa en camisa de manga corta.
Globally, population exposure to #HeatWaves will continue to increase because of #ClimateChange🤝@IPCC_CH pic.twitter.com/RmbLOnsTeU
— World Meteorological Organization (@WMO) July 19, 2022
El máximo responsable de la OMM señaló que espera que actual ola de calor sirva de «llamada de atención» a un mundo no siempre concienciado del todo ante la lucha contra el cambio climático, aunque reconoció que la preocupación social es mayor que hace décadas.
Taalas advirtió de los efectos de estos fenómenos climáticos extremos no solo en la salud de la población sino en importantes sectores económicos como la agricultura o el turismo. «No será muy confortable viajar a países como España, Portugal, Italia o Grecia si las temperaturas están por encima de los 40 grados», aseguró.
Salud comprometida
Por parte de la OMS, intervino en la rueda de prensa la directora de Salud y Medio Ambiente del organismo, la española María Neira, quien señaló que la actual ola de calor puede tener graves consecuencias en colectivos vulnerables como ancianos, niños o mujeres embarazadas.
«Queda comprometida la capacidad de nuestro organismo para regular la temperatura interna, y esto puede resultar en una cascada de enfermedades«, alertó Neira.
La experta española destacó también entre los más vulnerables a aquellas personas que padecen enfermedades crónicas y los trabajadores en el exterior, «obligados a veces a trabajar a altas temperaturas sin el equipamiento adecuado». Neira insistió en las recomendaciones que estos días muchos expertos han lanzado para llevar mejor las jornadas de altas temperaturas: permanecer en entornos frescos en la medida de lo posible, reducir la actividad física intensa, hidratarse, vestir ropas adecuadas o no consumir alcohol.
Aunque a largo plazo, según la experta, la mejor solución para «sobrevivir» a estos fenómenos climáticos extremos es «ser ambiciosos a la hora de atacar las causas del calentamiento global, del que hemos sido alertados hace mucho tiempo».
