Este martes 15 de septiembre arranca la 75ª sesión de la Asamblea General de la ONU, una cita clave para impulsar la ambición climática de los estados y avanzar la Agenda 2030 en un año en el que, debido a la pandemia, no habrá COP y todas las reuniones y discursos de alto nivel se harán de forma virtual



En su 75 aniversario, las Naciones Unidas se preparan para celebrar su Asamblea General más atípica. No habrá reunión de líderes mundiales en Nueva York, ni aglomeraciones en los pasillos o la el auditorio de la sede de la ONU. Tampoco estará Greta Thunberg ni habrá en principio concentraciones masivas, aunque los jóvenes buscarán nuevas fórmulas para hacer oír su voz. La pandemia de coronavirus ha trastocado toda la agenda internacional, incluyendo una COP26 que no se podrá celebrar hasta 2021, por lo que la Asamblea General de la ONU, que arranca esta semana, buscará animar a restablecer la acción mundial por el clima temporalmente nublada por el coronavirus, aunque también de manera virtual.
La propia ONU lo advertía la semana pasada en la presentación del informe United in Science 2020, un documento elaborado por diversas organizaciones científicas de vanguardia y coordinado por la Organización Meteorológica Mundial (OMM) en el que se analizan los principales efectos y causas del cambio climático a partir de los nuevos datos recabados durante el último año. Pese a los alentadores momentos de recuperación ambiental durante el confinamiento, cuando se redujeron las emisiones de dióxido de carbono y la contaminación en las ciudades hasta niveles desconocidos, las buenas noticias apenas fueron un espejismo y la crisis climática sigue acelerándose. Y sus crecientes e irreversibles impactos afectan cada vez más a los glaciares, los océanos, la naturaleza, las economías y las condiciones de vida de la población.
Ante esta situación y la perspectiva de que cualquier acción climática se retrase debido a la postergación de la COP26 de Glasgow al año que viene, la Asamblea General cobra especial importancia como único evento internacional de alto nivel de 2020 en el que se podrá reforzar la acción climática. Aunque la vasta mayoría de los líderes mundiales participarán virtualmente, sin acudir al recinto de la ONU, el objetivo es que los motores de la diplomacia global y el desarrollo sostenible funcionen a su ritmo acostumbrado. Entre otras cosas, está previsto que los demócratas de EEUU esbocen lo que estarían dispuestos a adoptar en lo relativo al clima en el caso de llegar al Gobierno, y la UE defenderá su fuerte “ambición” climática después de que el Parlamento Europeo acabe de apoyar aumentar al 60% el compromiso de reducción de emisiones para 2030 respecto a 1990.
Por el momento, se sabe que la cita otorgará especial énfasis a la defensa del clima, y de hecho, el principal evento climático de la ONU incluirá discursos del primer ministro británico, Boris Johnson, como responsable del país en donde está prevista la celebración en 2021 de la próxima Conferencia de las Partes (COP) sobre cambio climático. En este sentido, también se urgirá de nuevo a los países firmantes del Acuerdo de París a enviar antes de finales de año sus Planes Nacionales de reducción de emisiones para alcanzar los objetivos marcados.
El elegido para ser presidente de la 75ª sesión de la Asamblea General de la ONU ha sido el diplomático turco Volkan Bozkir, un funcionario público con casi 50 años de experiencia profesional y recientemente ministro de Asuntos Europeos. Bozkir ha asegurado que buscará garantizar que Naciones Unidas siga siendo relevante en las próximas décadas, un desafío para el que el tema clave será la protección de las personas y comunidades vulnerables en un momento en el que la pandemia y la crisis climática dificultan seriamente sus posibilidades de futuro.
Una «semana del clima» paralela
Al mismo que tiempo que los diplomáticos de todo el mundo discuten sobre el plan de acción de la ONU y los líderes de cada país desvelan sus intenciones climáticas para los próximos años, se celebrará también en Nueva York la Climate Week 2020, una semana en la que se abordará a través de más de 350 eventos paralelos qué lecciones podemos aprender de la pandemia en la búsqueda de un futuro en el que la neutralidad climática se logre a través de una transición justa. Organizada por la ONG Climate Group para que coincida con la Asamblea General, esta plataforma servirá para que las empresas y las sociedad civil puedan hacer presión a los países que se reúnen la ONU para que aumenten su ambición climática.
Esta presión externa tendrá también un punto álgido el próximo 25 de septiembre, que es cuando organizaciones ecologistas y jóvenes de todo el mundo desde el movimiento Fridays For Future han programado el Día de la Acción Climática a nivel mundial. El objetivo es emular lo ocurrido hace exactamente un año, cuando en septiembre de 2019, manifestaciones en cerca de 150 países de todo el mundo reclamaron medidas más contundentes frente al cambio climático. Eso sí, en esta ocasión, los organizadores ya han avisado de que esta vez se llevará a cabo acciones “ajustadas” a los nuevos tiempos de pandemia para poder así garantizar la seguridad sanitaria.
Por supuesto, la propia ONU también se ha movilizado para crear una agenda especial en este 75 aniversario de su fundación. Durante esta Asamblea General se destacará al desarrollo sostenible en una transmisión global de media hora ideada por el escritor, director y promotor de los ODS, Richard Curtis. El segmento, que se emitirá este viernes, llevará a la audiencia a un viaje mundial en una “exploración del tiempo en que vivimos, los desafíos que encara nuestro planeta y las acciones que pueden transformar al mundo” de ahora al 2030, cuando se espera alcanzar los ODS.También habrá un hueco especialmente reservado para la biodiversidad, después de que se pospusiera a 2021 la cumbre internacional en Kunming, China, para discutir cómo revertir el deterioro acelerado del entorno natural y el impacto en la vida de la gente. El objetivo será acelerar la implantación de convenios internacionales sobre protección de ecosistemas después de un año en el que los últimos datos indican que más de un millón de especies se encuentran en riesgo de extinción, 2.000 millones de hectáreas de tierra se han degradado y el 66% de los océanos, el 50% de los arrecifes de coral y el 85% de los pantanos están afectados de manera negativa y grave por la actividad humana.
Por último, también habrá un foco que se posará en el ODS 5, que busca lograr la igualdad entre los géneros y empoderar a todas las mujeres y las niñas. El 1 de octubre se discutirán éste y otros temas relacionados con la igualdad de género y el empoderamiento de la mujer al cumplirse 25 años de la Plataforma de Acción de Beijing, el plan internacional consensuado más amplio para el avance de los derechos de las mujeres y las niñas. Pero antes, el de 18 de septiembre, se celebrará por primera vez el Día Internacional de la Igualdad Salarial, que busca que se pague lo mismo por el mismo trabajo a hombres y mujeres.
