La UE pacta elevar al 55% la reducción de emisiones para 2030

La UE pacta elevar al 55% la reducción de emisiones para 2030

Los países europeos han dado por fin luz verde al aumento de la ambición en la reducción de emisiones de efecto invernadero de la UE, que ahora deberán recortarse para 2030 en un 55% respecto a 1990


Fumata «verde» en Bruselas. Tras meses de negociaciones, idas y venidas, los jefes de Estado que conforman el Consejo Europeo han acordado este viernes de madrugada fijar en un 55% su posición negociadora para la reducción de emisiones de efecto invernadero para el año 2030 respecto a los niveles de 1990, tras una maratoniana madrugada de negociaciones. Esto significa, en la práctica, que ese 55% se convierte de facto en el nuevo objetivo europeo de ambición climática para la próxima década, ya que es la misma cifra que defiende la Comisión.

«Europa es líder en la lucha contra el cambio climático. Hemos decidido reducir nuestras emisiones de efecto invernadero al menos un 55 % para 2030«, ha anunciado vía Twitter el presidente del Consejo Europeo, el belga Charles Michel. Y eso que, durante unos breves instantes, parecía que la negociación podía descarrilar por la resistencia de los países europeos más escépticos con la cuestión climática: Polonia, Hungría y República Checa.

De hecho, pese a que una gran mayoría de países, incluyendo los pesos pesados de la UE como Francia y Alemania, era partidaria de incrementar la ambición climática, la negociación se prolongó durante toda la madrugada del viernes precisamente por las reticencias de estados como Polonia, cuya economía es mucho más dependiente del carbón. Junto a ella se posicionaron los húngaros y checos, que tradicionalmente han estado entre los Estados miembros más críticos con las políticas «verdes» europeas, ya que demandan que se concrete en la legislación europea que no todos los países salen del mismo punto de partida en materia de emisiones, por lo que unos necesitan más apoyo que otros para llevar a cabo esta transición.

Además, la negociación se dificultó aun más porque la esperada decisión de los líderes, aún por detallar a nivel técnico, estaba ligada a que se desbloqueara el presupuesto y el fondo de recuperación. Y es que en estas partidas ya se incluyen herramientas que tendrán que utilizarse para alcanzar ese objetivo del 55% que es ya casi inminente, como los 17.500 millones de euros previstos para el Fondo de Transición Justa.

A la espera del documento final

En cualquier caso, el 55% acordado llega después de que la Comisión Europea haya pedido que el esfuerzo llegue a al menos a esa cifra y el Parlamento Europeo haya elevado esa ambición hasta el 60 % respecto a los niveles de 1990, frente a la meta del 40% fijado actualmente. Por su parte, las organizaciones ecologistas piden una reducción de «al menos 65%» en 2030.

Las tres instituciones comunitarias tendrán que negociar el documento final, cuyo resultado definitivo llegará después de que el Reino Unido haya anunciado su intención de recortar sus emisiones un 68 % en 2030 y de que también hayan renovado o ampliado sus compromisos climáticos otros países como China, Corea del Sur, Japón o Sudáfrica.

La decisión de los líderes llega en vísperas de que el sábado se celebre un encuentro virtual para celebrar el quinto aniversario del Acuerdo de París, que busca evitar que las temperaturas a final de siglo suban menos de 2°C e intentar limitar el calentamiento a 1,5 °C en relación con los niveles preindustriales. Ahora, con el aumento de la ambición bajo el brazo, la UE podrá centrarse en intentar mejorar las reducciones de emisiones de países que aún se resisten a implantar políticas climáticas, como Rusia, Australia o Brasil.



Se adhiere a los criterios de transparencia de

Archivado en:
Otras noticias destacadas