La madrugada del domingo termina el horario de verano que comenzó el pasado mes de marzo, por lo que a las 03:00 horas serán las 02:00 horas. Sin embargo, este cambio, que para muchos es un embrollo, tiene las horas contadas



Un año más, los españoles asistimos puntuales en octubre a un evento que para muchos, más que un beneficio, es todo un lío: el cambio de hora. Según el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico (Mitred), la madrugada del 25 de octubre finaliza el horario de verano, materializado con el retraso de los relojes una hora, de forma que a las 03.00 horas serán las 02.00 horas.
Las primeras disposiciones sobre el horario de verano se adoptaron en Europa en 1980 y, desde el año 2000, la directiva europea 2000/84/CE estableció las reglas que marcaron su inicio en marzo y su finalización en octubre.
No obstante, este cambio de horas para mucho es un auténtico embrollo y, ante el debate que suscitó la alteración horaria, la Comisión Europea llevó a cabo en 2018 una consulta pública en la que más del 80% de los 4,6 millones de ciudadanos que participaron se mostraron a favor de acabar con los cambios de hora.
En vista del resultado, la Comisión propuso finalizar esta práctica en marzo del 2019, aunque la falta de consenso obligó a la institución a retrasar esta decisión al 2021. En ese momento, los países de la Unión Europea deberán decidir si por permanecer en el horario de invierno o en el de verano.
“Si finalmente se decide adoptar de forma permanente el horario de verano, el último cambio de hora tendrá lugar en marzo de 2021. Por el contrario, en los países que decidan permanecer en el horario de invierno, el reloj se cambiará por última vez en octubre de 2021”, explica el Mitred.
En este sentido, España aún no ha decidido por cuál huso horario decantarse. La información de la que partirá la Administración Española para tomar esta decisión estará apoyada, entre otros, por la encuesta que el Centro de Investigaciones Superiores (CIS) realizó en noviembre de 2018 -en la que el 65% de los encuestados se manifestó a favor de permanecer en el horario de verano- y por un informe solicitado al Comité de expertos que el Gobierno creó específicamente para debatir esta cuestión en septiembre de 2018, entre otros.
Ahorro de energía
La Comisión de Industria, Investigación y Energía del Parlamento Europeo publicó en 2018 un informe que señala que, aunque los cambios estacionales de hora pueden producir ahorros, estos son marginales, y que no hay certeza de que los beneficios se obtengan en todos los Estados miembro.
El informe también indica que, aunque puede haber ahorros de energía en iluminación, no es tan evidente que ocurra lo mismo con la calefacción, que podría incluso aumentar su consumo. Además, los resultados son difíciles de interpretar ya que están fuertemente influenciados por factores externos tales como la meteorología o el comportamiento de los usuarios.
En España no existen informes actualizados que permitan asegurar que el cambio de hora lleve asociados ahorros energéticos. Además, las nuevas exigencias de eficiencia energética en iluminación, en los sistemas de climatización y en los propios edificios, así como la progresiva introducción del autoconsumo, alteran significativamente los análisis que originalmente se utilizaban para calcular estos datos.