A cara de perro por nuestro futuro 

A cara de perro por nuestro futuro  

A cara de perro por nuestro futuro  

Los líderes de la UE se reúnen para ponerse de acuerdo sobre el plan de recuperación económica tras la crisis del coronavirus. En España no tenemos tiempo que perder. Habrá que tener el valor de negociar y de pactar un acuerdo



LA HISTORIA

Hoy viernes 17 y mañana sábado 18 de julio, los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea se verán las caras para intentar ponerse de acuerdo sobre el plan de recuperación económica tras la crisis provocada por la pandemia por coronavirus.

¿Y CÓMO PINTA LA COSA?

Pues la verdad es que la cosa no está muy clara. Ni el poder de la canciller alemana, Angela Merkelque se estrena como presidenta de turno del Consejo Europeo, tratando de allanar el camino; ni la gira del presidente del Gobierno Pedro Sánchez para convencer a los países del norte del buen uso que se hará del Fondo de Reconstrucción tras la debacle económica dejada por la pandemia de la COVID-19 han evitado que el Consejo Europeo más definitivo de la historia de la Unión comience a cara de perro.

Viernes y sábado, 48 horas, tienen por delante los líderes de la UE para alcanzar un acuerdo de reparto de los 750.000 millones de euros del Fondo de Reconstrucción, donde la lucha no está en la cantidad sino en las condiciones y donde para una vez que nos apoyan los peces gordos no deciden ellos, sino la galaxia de los países del Este.

¿CUÁL ES EL PROBLEMA?

La situación socioeconómica que ha dejado la pandemia no es igual de grave en todos los países, y urgencia y prisa sólo tienen Italia y España, que son los dos estados comunitarios más castigados por el coronavirus.
España, tras las previsiones de desplome del PIB en torno al 14%, y una subida del paro de la misma magnitud, necesita cuanto antes los 140.000 millones de euros que corresponderían a nuestro país. Pero la batalla no está en las cantidades sino en las condiciones con la que ese dinero se entregará a cada país perceptor.

España partía de una postura firme de deuda compartida para el conjunto de la UE, con una parte importante de los recursos entregados a fondo perdido y sin condiciones. Pero tras la última gira de Sánchez, el Gobierno ya asume que habrá condiciones y que para que Bruselas nos fíe habrá que hacer renuncias programáticas y destinar el dinero allá donde Europa considere, con un plan de saneamiento a medio plazo para estabilizar el déficit y la deuda pública.

El grupo más reacio a una reconstrucción a fondo perdido es el denominado como los frugales (compuesto por Países Bajos, Suecia, Austria y Dinamarca) que ha aceptado que parte de los fondos de 750.000 millones de euros se repartan en forma de subvenciones, ahora bien, con condiciones que presentarán este fin de semana, tal y como se lo explicó el primer ministro holandés, Mark Rutte, a Pedro Sánchez y al presidente italiano, Giuseppe Conte.

EN ESPAÑA NO TENEMOS TIEMPO QUE PERDER

Así es. En otoño, con el final de los ERTEs y de la exigua temporada turística, la situación puede ser dramática. Como señaló Sanchez: «Si retrasamos la respuesta retrasamos la recuperación, y eso es algo que no nos podemos permitir”. Pero la propia Merkel reconoció que «todavía no es seguro» que se vaya a lograr un acuerdo esta semana. Las cesiones parecen inevitables.

Habrá que tener el valor de negociar y de pactar un acuerdo.



Se adhiere a los criterios de transparencia de

Archivado en:
Otras noticias destacadas