El debate en torno al agua quiere aumentar su relevancia en la agenda política española ante la necesidad de gestionar un bien vital y crucial en un contexto como el actual de reconstrucción económica sostenible. Sin embargo, “la administración pública no está tomando el sector del agua como un vector de desarrollo que a nosotros nos parece fundamental” según afirma Enrique Hernández, director general de AGA, quien ha advertido que el sector del agua urbana debería ser tractor de la economía local.